Desde que
Deco se hizo cargo de la función de director deportivo, no pocas voces empezaron a aventurar que su cohabitación con
Xavi Hernández sería complicada. Que si veían el fútbol de forma diferente, que si en su época de jugadores no eran amigos sino compañeros, que si iban a chocar a nivel de planteamientos tácticos y a la hora de afrontar las necesidades del equipo en el mercado de fichajes… Y a la hora de la verdad, entre ellos, nada de eso. Al contrario, gente cercana al entrenador destaca que la comunicación con
Deco es de lo más fluida en el día a día y que su apoyo y comprensión es máximo. Y eso no quiere decir que el director deportivo no pueda tener sus opiniones futbolísticas o que pueda tener alguna mirada divergente con la del técnico sobre alguna situación puntual, pero sabe exactamente cuáles son las líneas rojas para tratar con un entrenador y nunca ha generado un conflicto con
Xavi.
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