La fiesta ‘non stop’ del Real Madrid, iniciada hace diez días ante el
Cádiz tras certificarse el título de
Liga, seguida por la heroica clasificación para la final de la
Champions contra el Bayern y el paseo triunfal en
Granada, vivió este martes un nuevo capítulo con un nuevo festival goleador ante el
Alavés en otro día de celebración y exaltación merengue. En los prolegómenos,
Carlo Ancelotti y su tropa fueron recibidos por el
Bernabéu al grito de
“¡¡campeones, campeones!!”, con el capitán
Nacho Fernández entrando al césped con el trofeo liguero, mientras los babazorros hacían el pasillo de rigor.
Seguir leyendo...