La polémica surgida a partir de los dos buques que finalmente no han hecho escala en puertos españoles -uno, por decisión propia, y el otro, tras la negativa del Gobierno-, no sólo ha puesto de relieve las fisuras en el Ejecutivo de coalición, también suscita dudas en esferas diplomáticas, al considerar que puede afectar a las relaciones con aliados tradicionales, tanto de la Unión Europea como con Estados Unidos: "Es un nuevo capítulo que nos obliga a dar explicaciones sobre lo que ocurre en nuestro país sobre unos hechos ya consumados", revelan a Vozpópuli fuentes de este ámbito. ...