Durante el grotesco sexenio presidencial de Luis Echeverría en México (1970-1976) arraigó la apreciación de que, “si Kafka hubiera nacido en México, sería un escritor costumbrista”. El feliz hallazgo pronto se extendió a lares anejos hasta cruzar el Atlántico y encontrar puerto en la España sanchista dándose el caso extremo de Cataluña donde lo kafkiano y lo surrealista se dan la mano atendiendo a los resultados de las elecciones autonómicas de este 12 de mayo y a sus predecibles secuelas. Nada de ello hubiera sido factible sin un veleta andante que no conoce más verdad que la ...