El presidente el Gobierno, Pedro Sánchez, se ha desmarcado del resto de líderes europeos y España no enviará material bélico ofensivo a Ucrania. Sánchez ha evitado responder en TVE si esa decisión se debe a discrepancias con su socio de coalición Unidas Podemos.
Sánchez ha explicado que el Gobierno seguirá enviando ayuda humanitaria y material defensivo -chalecos o cascos. Pero no ofensivo. En ese sentido, se ha remetido al material que está haciendo llegar la Unión Europea a través de su fondo especial. Sánchez ha dicho que esta decisión se adopta porque la invasión rusa de Ucrania es «una amenaza a la Unión Europea y merece una respuesta europea».
A diferencia de muchos de sus colegas europeas, Sánchez se ha mantenido en segundo plano desde que comenzó la invasión rusa. El presidente solo ha comparecido una vez, sin preguntas. Y La Moncloa filtró durante el fin de semana que Sánchez había telefoneado a los cuatro expresidentes vicos de la democracia (Felipe González, José María Aznar, José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy) para conocer su opinión sobre la magnitud de la crisis y el papel que debe jugar España.
El Gobierno ha completado la evacuación de unos 200 españoles de Ucrania tras cerrar la embajada. Y ha enviado ayuda humanitaria y material a Kiev, pero no ofensivo como otros países de nuestro entorno. Sánchez publicó en Twitter que había conversado el domingo con el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski. Pero Zelenski no mencionó ni a Sánchez, ni a España en los mensajes que suele tuitear cada jornada para resumir el contenido de sus conversaciones con distintos líderes internacionales.
Sánchez alertó en su discurso institucional del jueves en La Moncloa de un fuerte impacto económico para nuestro país debido a la guerra. «Este conflicto y las sanciones que derivan de él va a tener un impacto económico en nuestro país, especialmente en los mercados energéticos«, dijo Sánchez. «La Unión Europea tiene una nueva oportunidad de demostrar unidad, solidaridad e integración dedicando los medios necesarios y tomando las decisiones para responder a esta grave crisis y a sus efectos económicos».
Sánchez aseguró que su Gobierno «tomará cuantas medidas sean precisas para mitigar el impacto económico, también el energético de esta crisis sobre la sociedad española, sobre sus empresas, sobre su industria y sobre la recuperación económica que estamos iniciando al filo de la recuperación de la pandemia».
