La Justicia mantiene su cerco a la excúpula de ETA en el marco de la investigación abierta por el asesinato del edil del PP Gregorio Ordóñez. El magistrado Alejandro Abascal ha acordado una batería de diligencias para acreditar la autoría intelectual en este asesinato de los dirigentes de la banda terrorista. Por ello requiere a la Guardia Civil que localice las actas de reunión del «comité ejecutivo» de ETA en fechas cercanas al asesinato del líder del PP en Guipúzcoa en enero de 1995 y que acreditarían la asistencia a estas reuniones de los entonces integrantes del comité ejecutivo, así como su capacidad de decisión en la selección de los objetivos de la banda.
En su auto, el magistrado explica que tras citar en sede judicial a dos de los imputados en la causa (Mikel Antza e Iñaki de Rentería) es preciso recabar más documental sobre estos hechos «en orden a determinar su participación como autores mediatos». Por ello libra oficio a la Guardia Civil para que encuentre dichas actas (intervenidas en los diferentes operativos de detención a etarras) así como que recaben información de los dispositivos informáticos que requisaron las autoridades francesas tras la detención de Antza en octubre de 2004 en Salies-de-Béarn (Francia). Todo este material forma parte del conocido como ‘archivo de ETA’ que Francia entregó a España en 2018.
Las diligencias del juzgado, adelantadas en diciembre por Vozpópuli, se centran en encontrar «datos, indicios o informaciones relacionadas con Gregorio Ordóñez en 1995. «Igualmente se trata de localizar documentos relacionados con actas de reunión del Zuba (la dirección de ETA) de los que se conoce su existencia y en los que en su momento se pudo acceder mediante colaboración policial», reza el auto del magistrado Alejandro Abascal.
Además, Abascal pide incorporar a este procedimiento documental de otras causas sobre acciones de ETA, tales como el intento de atentado al Rey Juan Carlos en Palma de Mallorca en 1995 o de los dos etarras que secuestraron al exfuncionario de prisiones José Ortega Lara. La finalidad es la misma: probar que estos ataques también habrían sido diseñados por la cúpula de la banda terrorista. En lo que respecta al intento de asesinato del emérito, el juez recuerda que los documentos judiciales y policiales destacan el papel de José Javier Arizcuren ‘Kantauri’ “respecto a la orden, planificación y aportación de los medios necesarios” al comando encargado el ataque.
Precisamente Kantauri es uno de los cinco exdirigentes de ETA imputados en el procedimiento por su implicación en el asesinato a Ordóñez. Además de Kantauri, el magistrado imputó a Iñaki de Rentería, Mikel Antza, Juan Achurra Egurola’‘Pototo’ y Juan Luis Aguirre Lete, ‘Insuntza’. En lo que respecta a Kantauri –pendiente de su entrega por parte de las autoridades francesas– el magistrado explica que su implicación en el ataque al rey emérito tiene “similitudes” con esta causa en tanto se trata de acciones cualificadas “que necesariamente necesitan permiso del Zuba para llevarse a cabo”.