Derribado (en gran parte) el tabú en torno a las relaciones sexuales, aún son muchos los que esconden e incluso dudan sobre el sexo oral. Considerada una de las prácticas sexuales mejor valoradas, llama la atención las numerosas creencias y dudas que existen en torno a ella. Y es que el desconocimiento, los perjuicios y el reparo a preguntar han creado un mundo de mitos en torno al sexo oral.
Unos mitos que desde hace años han ganado popularidad y que podrían estar perjudicando no solo a nuestra vida sexual, sino también a nuestra salud.
Así lo advierten los expertos que no solo señalan a los más jóvenes como los que practican sexo oral sin conocer los riesgos que conlleva. Los estudios demuestran que otros grupos de población con edad más avanzada también caen en estos extendidos mitos.
Desde hace unos años, muchos son los estudios que tratan de arrojar algo de luz a algunas de las dudas más extendidas sobre el sexo oral, y que son el origen de los mitos que más populares se han hecho.
Este es uno de los mitos más comunes y resulta completamente falso. Así lo aseguran los expertos que advierten que a través del sexo oral sí se pueden contagiar ETS como el virus del papiloma humano, la gonorrea o el herpes genital. Además, se apunta a que son los más jóvenes los que más llevan a cabo esta práctica sin ningún tipo de seguridad.
Aunque para muchos esta es una clara evidencia, los expertos confirman que hay muchas mujeres que dudan si practicando sexo oral existe riesgo de embarazo. Este mito es completamente falso. El semen no está en contacto con el óvulo, por lo que no hay posibilidad.
Diferentes informes recogen este mito como uno de los más extendidos y que recomienda no lavarse los dientes antes de practicar sexo oral para que no se produzcan heridas en la boca evitando así la posibilidad de contagiar una enfermedad de transmisión sexual. Según los expertos, es un mito complemente falso, aunque sí advierten que es recomendable no practicarlo si existe algún tipo de sangrado o heridas.
Sin duda, este es otro de los mitos más extendidos. Tal y como comentábamos, el sexo oral no evita el contagio de infecciones de transmisión sexual, por lo que los expertos recomiendan utilizar protección siempre, más aún cuando se trata de un encuentro esporádico con alguien que no es la pareja habitual. Existen en el mercado preservativos especiales para esta práctica, más cómodos.
Existen numerosas investigaciones que tratar de arrojar luz ante esta afirmación. En los últimos años, los expertos señalan que no se puede hablar del sexo oral como único factor que provoque cáncer, existen otros a considerar. También matizan que algunos tumores han sido vinculados a la infección del virus del papiloma humano, que se puede transmitir a través del sexo oral, provocando cáncer bucal.
Aunque sí es cierto que el consumo de determinados alimentos puede influir en los líquidos corporales, y en este caso, modificar el sabor y el aspecto del semen, es completamente falso el mito que asegura que tomar un zumo de piña antes de practicar sexo oral hace que el semen adquiera ese sabor.
Este es uno de los mitos que mayor debate genera. Hace unos años, un estudio realizado en la Universidad de Leiden, en Holanda, sugirió que practicar sexo oral durante el embarazo, en el que la mujer traga el esperma del padre, ayudaría a disminuir el riesgo de preeclamsia. Aunque los datos desvelaron que al ingerir la madre el líquido seminal con el HLA del padre, podría evitar esta complicación, los expertos hablan de una hipótesis y aseguran que esta investigación no puede tomarse como algo concluyente.
