Vapeadores contienen sustancias adictivas y tóxicas potencialmente peligrosas para la salud, detecta análisis de Inciensa. Menores de edad son los más vulnerables, advierten especialistas.
Al menos 8 compuestos tóxicos, doce peligrosos y dieciocho irritantes fueron detectados en un muestreo realizado con 28 dispositivos de vapeo, conocidos popularmente como vapeadores y, técnicamente, como Sistemas Electrónicos de Administración de Nicotina (SEAN).
Los compuestos identificados por el estudio el Centro Nacional de Referencia de Bromatología del Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud (Inciensa) se dividieron en estas cinco categorías:
El Informe de análisis de composición (Nicotina, Propilenglicol, Glicerina, CBD) de líquidos para Sistemas Electrónicos de Administración de Nicotina (SEAN), del cual el Ministerio de Salud facilitó copia a La Nación, trabajó las 28 muestras en dos grupos: 13 muestras en presentación de líquidos para SEAN, y 15 cigarros electrónicos o dispositivos sellados con líquido en su interior.
Además de revisar la presencia de nicotina, glicerina y propilenglicol, el Inciensa hizo un análisis por cromatografía de gases con detector de masas (GC-MS) para identificar otros componentes.
El análisis del Inciensa encontró que el contenido de nicotina en los líquidos de los SEAN no recargables es mayor en comparación con los líquidos muestreados.
Como se ve en la siguiente imagen, la presencia de esa sustancia adictiva y con efectos nocivos para la salud supera lineamientos internacionales, entre ellos, los de la Unión Europea, que establecen un límite máximo de 20 mg/ml para líquidos en SEAN de presentaciones de 10 ml.
Según la ministra de Salud, Mary Munive Angermüller, la cantidad de nicotina que se absorbe mediante el vapeo puede ser mayor, lo que aumenta el riesgo de adicción o dependencia en quienes consumen estas sustancias.
En los análisis se detectaron glicerina y propilenglicol, empleadas en estos dispositivos como disolventes. Munive explicó que son sustancias agregadas con el fin de proporcionar una experiencia de fumado con humo más denso. El disolvente se utiliza para reducir las molestias en la garganta.
Estos compuestos, sobre todo calentados, elevan su potencial cancerígeno y su toxicidad a nivel pulmonar, explicó la ministra, quien es médica.
La ingestión, inhalación o contacto con la piel y ojos de estos compuestos puede provocar severas consecuencias como la enfermedad pulmonar asociada al vapeo (Evali, por sus siglas en inglés), que puede ser grave y potencialmente mortal, caracterizada por una lesión pulmonar relacionada con el uso de cigarrillos electrónicos o vapeo.
“Los hallazgos mostrados refuerzan la necesidad de un monitoreo continuo de estos productos para la identificación oportuna de compuestos tóxicos que terminen en alertas para quienes los consumen. Es necesario contar con una legislación oportuna que permita la toma de medidas para mitigar la distribución y exposición de estas sustancias en la población”, recomiendan los expertos.
Los profesionales que trabajaron en el análisis de estas muestras son Óscar Fernández Sánchez, Luis Sánchez Chinchilla y Thelma Alfaro Calvo. El informe fue revisado y aprobado por Anamariela Tijerino Ayala y Lissette Navas Alvarado.
Las 28 muestras fueron recogidas en diferentes establecimientos del país en agosto del 2023, entre ellos, supermercados y tiendas de venta de vapeadores. El informe de análisis de composición de contenidos se hizo en octubre de ese año. Sin embargo, los datos trascendieron el 14 de mayo pasado.
Ese día, la ministra anunció una resolución emitida por Salud que prohíbe la importación, uso, venta y comercialización de productos con nicotina sintética, en un intento de frenar los efectos del vapeo, principalmente en menores.
Para justificar la medida e informar de nuevas regulaciones y cambios para fortalecer la normativa existente, Munive reveló algunos resultados del análisis del Inciensa sobre la composición de los contenidos en vapeadores.
Además, presentó datos de atenciones médicas en hospitales de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) debido al vapeo. En lo que va del 2024, los hospitales públicos han atendido a 1.290 personas con daños pulmonares asociados a esa práctica.
De ellos, 774 son hombres (un 60%) y 516 son mujeres (40%), según información de los servicios de consulta externa al 8 de mayo anterior revelada por el Ministerio de Salud. Un 38% de estos pacientes tienen edades que van de los 10 a los 29 años.
En todo el 2023, la CCSS registró 1.791 casos. Un año atrás, la cifra fue de 77 pacientes, mientras que en el 2022 se dieron solo 12 reportes. Las 1.290 personas atendidas hasta el 8 de mayo representan un 72% de las vistas el año pasado. En total, entre 2021 y 2024, se han recibido en los servicios médicos a 3.170 personas por esta causa.
Los investigadores del Inciensa advierten de que el análisis del contenido en los 28 vapeadores tuvo sus limitaciones. Una de ellas fue el equipo con el cual se hizo, que no permite identificar todos los compuestos químicos presentes en los líquidos SEAN ya que se requieren aparatos más sensibles.
Calculan que entre un 2% y un 3% de la totalidad de compuestos presentes en las muestras recogidas no fueron identificados por esa limitación. Además, ante la ausencia de una reglamentación de control en el país, el informe utilizó como referencia las recomendaciones de la Unión Europea.
El análisis del Inciensa reveló que en la mayoría de los líquidos para SEAN no recargables tienen un mayor número de compuestos, especialmente ácido benzoico. Otros compuestos presentes en ambas categorías de muestras fueron vainillina, maltol y etil maltol.
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El estudio advierte: “La diversidad química parece estar mayormente ligada a los líquidos en SEAN no recargables, lo que representa un riesgo mayor para la salud de la población que normalmente consume estos productos”.
Según el informe del Inciensa, vigilar la composición de los líquidos utilizados en el vapeo es de gran importancia pues en el mundo se han registrado intoxicaciones que han obligado a varios países a prevenir su consumo.
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En Costa Rica, 14 personas se intoxicaron por vapear en el 2023. Esta cifra duplica los casos atendidos telefónicamente un año antes por el Centro Nacional de Control de Intoxicaciones (CNCI) de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
De esas 14 intoxicaciones, nueve sucedieron en menores de edad (64,2%). Entre ellos, hubo dos niños de 2 y 3 años, quienes utilizaron el vaporizador por descuido de sus padres, consumidores de sustancias en estos dispositivos.
Los investigadores del Inciensa explican que el vapeo expone al fumador no solo a la nicotina presente en el líquido para vapeadores, sino también a todos los productos que puedan generarse, muchos de los cuales aún no están del todo caracterizados. Por lo tanto, se desconoce su riesgo potencial.
Además, consideran necesario y prioritario un reglamento para vigilar el contenido de nicotina y los compuestos tóxicos en vapeadores.
