El
Cádiz estará en Segunda división la próxima temporada tras empatar este domingo en casa ante
Las Palmas, que por su parte certificó su permanencia en Primera aunque encadene nada más y nada menos que 13 partidos sin ganar (0-0). En un encuentro no apto para cardiacos, con más imprecisiones que buen fútbol, los goles brillaron por su ausencia. Con uno solo hubiese bastado para que el
Cádiz lograse el triunfo con el que llegar a la última jornada con opciones de salvación, pero no lo encontró. Lo busco con ahínco en el tramo final, incluso en inferioridad numérica por la expulsión de
Chust mediada la segunda parte, pero no hubo manera.
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