Un formato de lo más llamativo que muchas corrieron a comprar nada más salió.
Que sentimos debilidad por los coloretes es algo difícil de ocultar, aunque tampoco es que pongamos mucho empeño en hacerlo. Nos encanta ese toque de color en nuestras mejillas, ese rubor que nos hace parecer que acabamos de volver de tomar el sol todo el día en la playa, porque nos da cierta vida al rostro. Por eso hemos sido muy felices viendo como la popularidad de los coloretes crecía exponencialmente en estos últimos años, convirtiéndose prácticamente en un imprescindible de cualquier rutina de maquillaje que se precie. ]]>