Este suceso ocurrió en el año 1997, cuando cumplió 18 años de edad. Su familia pensaba que estaba sin vida; sin embargo, apareció luego de 27 años.
En 1997, en medio del constante estruendo de la guerra civil argelina, desapareció Omar bin Omran, un joven de 18 años. La última vez que se le vio, caminaba hacia un centro educativo cercano en Djelfa.
El conflicto, que sumió a Argelia en una espiral de violencia entre el Gobierno y los grupos rebeldes islamistas, dejó un rastro de sangre y desesperación. La familia de Omar, como muchas otras, temía que él hubiera sido víctima de la brutalidad del conflicto.
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De acuerdo con los informes, el entonces joven de 18 años de edad caminaba hacia la escuela cuando, de manera repentina, fue víctima de un secuestro. Su familia nunca volvió a tener noticias de él; desconoció su paradero e incluso si este seguía con vida.
Con el tiempo, llegaron a la conclusión de que había fallecido. Sin embargo, un proceso relacionado con una herencia finalmente reveló su ubicación.
La guerra civil argelina, que se prolongó durante una década, representa un sombrío capítulo en la historia del país. Más de 200.000 personas perdieron la vida y alrededor de 20.000 fueron secuestradas. En medio de este caos, la desaparición de Omar se diluyó entre las estadísticas de tragedias cotidianas.
La familia nunca abandonó la búsqueda de respuestas. A lo largo de los años, la madre mantuvo la esperanza de que su hijo regresaría algún día, incluso después de su fallecimiento en 2013. Este deseo se convirtió en su último ruego a las autoridades para que continuaran la búsqueda.
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El último 12 de mayo, después de 27 años de incertidumbre, se reveló la increíble verdad sobre Omar. Fue encontrado a tan solo 200 metros de su hogar, en un agujero cubierto de heno. Lo secuestraron cuando tenía 18 años y, actualmente, tiene 45.
El responsable de su encierro resultó ser un vecino de 61 años identificado como BA, quien lo mantuvo cautivo durante casi tres décadas. Este descubrimiento se produjo debido a una disputa de herencia que llevó al hermano del captor a revelar el secreto en redes sociales.
Las imágenes del rescate mostraban a un Omar visiblemente afectado, con una larga barba y temblando mientras los agentes de seguridad lo sacaban del oscuro calabozo, el que había sido su prisión.
Después de su rescate, Omar bin Omran compartió una historia increíble con sus salvadores. Durante los largos años de cautiverio, tuvo momentos en los que podía ver a su familia desde su prisión subterránea, pero nunca pudo pedir ayuda.
¿Cuál fue el motivo? Según él, había un hechizo lanzado por su captor que lo mantenía en silencio. Aunque esta declaración resulta increíble para muchos, resonó profundamente en la cultura local, donde las creencias en la hechicería y los encantamientos aún persisten.
