El equipo azulgrana arrasa a la Real Sociedad y gana la Copa de la Reina, que una a Liga y Supercopa. El sábado busca la Champions ante el Lyon
Una forma de honrar al rival, cuando hablamos de deporte profesional, no de niños, es jugar con todo pese a sentirte superior, no ser condescendiente, y eso hizo el Barcelona en la final de la Copa de la Reina. Su rival era la Real Sociedad y parte de sus opciones pasaban por resistir un rato largo con la portería a cero y jugar con el tiempo para que las azulgrana pudieran ponerse nerviosas y precipitarse. Pero a los cinco minutos ya encajó el primer gol el equipo vasco después de un gran pase de Claudia Pina para que Batlle se escapara a la carrera y resolviera a la segunda, tras un rebote.
Todavía hubo que esperar un poco para confirmarlo por la posición de la lateral, pero desde que el VAR dijo que era correcta, el día se convirtió en una pesadilla para la Real.
Si el Barcelona, además de ser superior por presupuesto y por la calidad de sus futbolistas, tiene el día inspirado y el rival un día malo, puede suceder lo que sucedió. Explotó las bandas con Salma y Graham y encontraba a Aitana y Mariona con facilidad en la zona central. Movió la pelota rápido el equipo de Jonatan Giráldez y las oportunidades empezaron a sucederse. El segundo tanto llegó en un cabezazo de Salma tras un centro preciso de Mariona.
Justo después tuvo que intervenir Sandra Paños, la veterana portera posiblemente en su último partido con el Barça, por primera vez. No había pasado ni media hora, pero es que antes del descanso el resultado estaba más que decidido con un 5-0. Hansen logró un doblete y Batlle también sumó su segundo gol. A la Real Sociedad le costaba salir de su campo, sometida por la presión de su oponente. Con 3-0 ya en contra tuvo la mejor ocasión, en una escapada de Bernabé por la izquierda. Su centro le llegó a Franssi, que remató demasiado alto. También por arriba se marchó el intento de Andreia poco después.
El Barcelona juega el próximo sábado la final de la Champions contra el Lyon, en Bilbao, y Giráldez empezó a hacer algún cambio pensando en esa cita. El problema para la Real es que si del campo se va la actual Balón de Oro Aitana lo hace para que entre la dos veces Balón de Oro Alexia, o si se marcha Salma, entra Rolfo, otra de las mejores futbolistas del mundo. Sólo en el último cuarto de hora se sintió más liberada la Real y se lanzó al ataque ante un rival ya más relajado. El marcador final, aunque esta vez fue un poco más exagerado, muestra una realidad: que en España el Barcelona juega a una cosa y el resto de equipos a otra. La Copa es su tercer título del curso, tras la Supercopa y la Liga, que conquistó a falta de cuatro jornadas para el final.
La final, por cierto, arrancó con unos maleducados pitos al himno español.
0-Real Sociedad (1-5-3-2): Lete; Emma (Viles, 81'), Aparicio (Etxezarreta, 70’), Vanegas, Arnaiz (Jacqueline, 59’), Bernabé (Cecilia, 59’); Franssi, Andreia, Eizagirre; Jensen (Lorena, 70’) y Amaiur. Natalia Arroyo (Entrenadora)
8- Barcelona (1-4-3-3): Paños; Bronze (Torrejón, 63’), Paredes, Engen, Batlle; Aitana (Alexia, 46’), Patri Guijarro (Walsh, 54’), Pina; Hansen (Brugts, 68’), Salma (Rolfo, 54’) y Mariona. Jonatan Giráldez (E)
Goles: 0-1, 5’ Batlle. 0-2, 13’ Salma. 0-3, 19’ Hansen. 0-4, 25’ Hansen. 0-5, 33’ Batlle. 0-6, 48’ Mariona. 0-7, 52’ Pina. 0-8, 58’ Mariona.
Árbitra: María Eugenia Gil Soriano (Comité gallego). Sin amonestadas.
Incidencias: La Romareda, 25.617 espectadores. Se pitó el himno español antes del comienzo.
