El capitán acusa directamente a Del Nido Carrasco de no haberle ofrecido la continuidad y el presidente reacciona con una rueda de prensa y un contrato vitalicio para el lateral internacional
Después de anunciar en redes sociales que su tiempo en el Sevilla se terminaba, Jesús Navas hizo temblar los cimientos del club con una carta demoledora publicada en la noche de este viernes, en la que acusaba directamente a la directiva actual de ser la culpable de que una leyenda del sevillismo se marchara justo después de cumplir los 500 partidos en Liga con esa camiseta. Navas explicaba que "no ha habido ninguna llamada, ninguna", de los dirigentes del club para "proponer la continuidad" del futbolista con más partidos disputados y más títulos en la historia de la entidad.
El capitán del Sevilla considera "todavía peor que después de comunicar" su marcha a final de temporada "no hubo un 'espera vamos a verlo' " cuando "siempre" le comentaron "que podía estar aquí hasta que quisiera".
"Nadie me ha despejado las dudas. Lo único que quería era poder disfrutar en una inolvidable última jornada en Nervión. Eso es lo único que importa, mi afición y mi Sevilla, porque lo importante es poner el corazón y la sangre sevillista, y eso es todo lo que he hecho en todos estos años", añade la carta de Navas a los sevillistas.
El lateral internacional considera "doloroso" que se filtre que se va "por tener una mejor oferta, pero si hubiera sido por eso, no hubiera estado" en el que califica como su "equipo del alma prácticamente en ningún momento" de su carrera e indicó que no tiene decidido dónde jugará la próxima temporada porque quiere "ayudar a España" en la inminente Eurocopa.
Navas resalta que el de su marcha es "un día triste y difícil" que "nunca" pensó "que llegaría", pero se ve forzado a irse porque es "una locura lo que estaba viviendo" en un Sevilla convulso al que ha "peleado por sacar adelante" desde "el año pasado", cuando ya coqueteó con las plazas de descenso.
"Ni yo mismo me lo creo. A mis compañeros les explicaba que era una locura lo que estaba viviendo, porque entiendo que no puedo ver así a mi Sevilla por cómo lo vivo y cómo lo siento. Sólo los más íntimos saben lo que costaría pensar en una salida", añade el escrito del futbolista.
El presidente del Sevilla, José María del Nido Carrasco, ha reaccionado con una rueda de prensa a primera hora de este sábado, en el que ha contado una versión muy distinta de lo sucedido a la que tiene Jesús Navas y su entorno. Él pensaba que con lo que había dicho de que quería que el futbolista siguiese para siempre en el club era suficiente, pero no ha sido así. "Entendí que era más que suficiente el compromiso adquirido. Desde que soy presidente, en todas las intervenciones en medios de comunicación que se me pregunta por Jesús y por Sergio (Ramos) digo que el momento de hablar era después de la temporada. El Sevilla hasta el día del Mallorca no tenía asegurada la permanencia y para mí las renovaciones había que dejarlas para cuando acabase la temporada, con la tranquilidad de que yo ya había trasladado cuál era la idea del club. Quizá no fui lo suficientemente claro mi posición", decía el directivo sevillista, que cree que en las palabras de Navas, aunque son duras, hay un resquicio para que dé marcha atrás y siga vistiendo de rojo y blanco. "Me alegra que Jesús diga que no tiene ningún acuerdo económico. Sabiendo lo difícil que va a ser el verano para el club, espero que Jesús sea una pieza clave de ese proyecto. Si nos sentamos en un minuto, lo arreglamos. Ofrezco a Navas un contrato vitalicio para que esté en el Sevilla el tiempo que quiera y cuando cuelgue las botas siga trabajando en el club hasta el último día de su vida. Si mantiene su decisión de salir lo respetaré y esperaré que el club esté a la altura en su salida, pero espero y deseo que siga en el Sevilla", terminaba el presidente.
