Naim Gol, miembro del Batallón Shati del grupo islamista palestino, estuvo a cargo de la cabo Noa Marciano, cuyo cadáver fue encontrado en noviembre en las inmediaciones de Al Shifa
El Ejército israelí ha anunciado este domingo la muerte de Naim Gol, el militante de Hamás que estuvo a cargo de la soldado israelí Noa Marciano, una de las más de 250 personas secuestradas por los islamistas el pasado 7 de octubre que murió semanas después en el Hospital Al Shifa de la Ciudad de Gaza.
Según el comunicado emitido por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), Gol, que participó «en el lanzamiento de cohetes hacia territorio israelí y se le confió a la cabo Noa Marciano», falleció el pasado viernes en una operación conjunta de las FDI y el Shin Bet, los servicios secretos israelíes para el interior y los territorios palestinos ocupados. Formaba parte del Batallón Shati del grupo islamista palestino. «Las FDI y el Shin Bet seguirán actuando con determinación para localizar a los agentes terroristas militares que llevan a cabo actos de terror contra ciudadanos israelíes, así como a aquellos involucrados en incidentes de secuestro y asesinato», sentencia la nota del Ejército israelí.
Los padres de Marciano revelaron la pasada semana que su hija había sido asesinada por un médico de Al Shifa, el centro hospitalario más grande de la Franja de Gaza. «Eligieron asesinarla en lugar de ocuparse de ella. Fue un médico quien lo hizo, en un hospital. Estaba herida por los bombardeos de la aviación y la llevaron a Al Shifa», trasladaron sus padres a la prensa.
«Las heridas observadas parecen más consistentes con heridas de bala, y también hay indicios de que pudo haber sufrido heridas relacionadas con una caída desde una altura», recogía un informe del Ejército hebreo. Hamás, en cambio, atribuyó su muerte a los ataques aéreos israelíes. El cadáver de la soldado de 19 años, secuestrada en la base militar de Nachal Oz, fue recuperado en noviembre en las inmediaciones del Hospital Al Shifa. Vivía en Modiin y era la mayor de tres hermanos.
