Este martes ha dado comienzo el juicio contra los que son considerados los cabecillas de un grupo de extrema derecha acusados de pertenecer o apoyar “una acción de alta traición”, en la Audiencia territorial de Fráncfort, en Alemania. El supuesto golpe de Estado que preparaban los acusados estaba liderado por el aristócrata Heinrich XIII, príncipe de Reuss, un empresario de 72 años activo en el sector inmobiliario y en la producción de champán.
Según la Fiscalía, este hombre se disponía a ejercer de “jefe de Estado”, en caso de que triunfara el cambio de régimen que deseaban perpetrar los nueve acusados que este martes se han sentado en el banquillo, en el segundo juicio que se celebra en Alemania por la supuesta trama golpista.
En la lista de acusados también figura la exjueza Birgit Malsack-Winkemann, una exdiputada del partido de ultraderecha Alternativa para Alemania (AfD), además de varios militares alemanes retirados. En el caso de ser considerados culpables por la intentona golpista de la que se les acusa podrían ser condenados a hasta diez años de cárcel, según prevé el artículo 83 del Código Penal alemán.
El aristócrata y el resto de acusados fueron detenidos a finales de 2022 en la que se recuerda como una de las mayores redadas organizadas por la Policía en Alemania. En total fueron arrestadas 27 personas.
La Fiscalía entiende que, desde agosto de 2021, los acusados planearon la entrada de un grupo de hombres armados en el edificio del Reichstag de Berlín (sede del Bundestag, la Cámara Baja del Parlamento alemám), en una operación destinada a “derrocar el sistema”. “La organización inició los preparativos concretos, como el reclutamiento de personal militar, la adquisición de material y la realización de entrenamientos de tiro”, según la Fiscalía.
A los acusados se les relaciona con el movimiento de los “Reichbürger” (Ciudadanos del Reich), que no reconocen la soberanía actual de Alemania y que rechaza el orden democrático liberal. Están firmemente convencidos de que Alemania está gobernada por lo que ellos llaman “Estado profundo”, en lugar que por las actuales instituciones democráticas.
“Es bueno que a partir de hoy también los presuntos cabecillas del mayor grupo terrorista de 'Reichsbürger' hasta la fecha tengan que comparecer ante un tribunal”, ha dicho la ministra alemana del Interior, Nancy Faeser,
El de Fráncfort es el segundo de tres procesos penales iniciados contra esta presunta tentativa golpista. El pasado mes de abril comenzó en la Audiencia territorial de Stuttgart otro juicio contra otros nueve acusados de pertenecer a lo que se identifica como representantes del brazo armado del grupo que lideraba Enrique XIII.
Un tercer juicio está previsto que dé comienzo el próximo 18 de junio en la Audiencia territorial de Múnich, donde se sentarán el resto de detenidos acusados de integrar supuestamente el grupo golpista de extrema derecha.
