La Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales de Madrid está en proceso de adjudicar un contrato para el suministro de menús en los centros de día a su cargo en Móstoles, Torrejón de Ardoz y Getafe durante los próximos dos años. Serán 326.872,26 euros divididos en tres lotes, de forma que el coste total diario no supere los 7,29 euros (IVA incluido) para desayuno, comida y merienda. El importe también debe cubrir los costes laborales, de transporte y limpieza.
Los términos de la licitación, adelantada por la Cadena SER, estipulan que las comidas no se prepararán en cocina, sino por el sistema de ‘catering’ de “línea fría” (cocinar, enfriar y mantener refrigerado hasta servir). Con los 2,43 euros de media para cada una de las comidas se deberían cubrir costes del siguiente modo, según el pliego de condiciones: 70,9% para materia prima, 18,5 para costes de personal, 5,3% para gastos generales y un beneficio industrial de otro 5,3%.
Solo una empresa se ha presentado a la licitación y la Agencia Madrileña de Atención social (AMAS), el organismo dependiente de la consejería que gestiona los centros de día, le ha requerido documentación adicional sobre cuestiones tributarias. En el PSOE consideran que el contrato puede acabar declarándose desierto. “Con esa miseria no se atreve nadie”, deduce la diputada del PSOE en la Asamblea de Madrid Lorena Morales, vista la falta de candidatos y el ajustado coste.
Morales recuerda, además, que el menú del día completo en la Asamblea de Madrid tiene un precio máximo de casi el doble que el previsto para las tres comidas del contrato para centros de día. El portavoz socialista, Juan Lobato, también se ha referido al asunto en respuesta a los medios tras la junta de portavoces de la Asamblea de Madrid. Con el precio ofrecido es “imposible” dar el servicio si se quiere hacer “con una dignidad y una calidad mínima”, ha criticado. El portavoz del PP en la cámara, Carlos Díaz-Pache, ha dicho: “Entiendo que se hace con criterios de mercado, con un precio que está ajustado para poder dar la calidad necesaria”.
La calidad de las comidas ofrecidas por los servicios sociales de la Comunidad de Madrid lleva tiempo resultando polémica. Particularmente cuestionado fue el contrato para los centros de menores y de residencias de mayores dependientes de la AMAS, que dieron lugar a episodios de alimentos en mal estado y quejas por la escasez y mala calidad de la comida que llegaron hasta la Asamblea de Madrid.
