La polémica por los ataques de Javier Milei contra Pedro Sánchez y su esposa, Begoña Gómez, han movilizado también a la cúpula empresarial. Presidentes y consejeros delegados que se reunieron con el mandatario argentino le pidieron que no atacara al presidente porque no se querían ver involucrados en una campaña contra el Gobierno.
El presidente de Argentina logró reunir el pasado sábado a una quincena de representantes de grandes empresas y bancos españoles en una reunión en Madrid para intentar atraer inversión.
La delegación fue encabezada por el presidente de CEOE, Antonio Garamendi, y participaron ejecutivos de alto nivel como el consejero delegado del grupo Santander, Héctor Grisi, el vicepresidente de Mapfre, José Manuel Inchausti, o el CEO de Telefónica Hispam, Alfonso Gómez, entre otros representantes de grupos con interés en Argentina como BBVA o Naturgy.
Durante la estancia de Javier Milei en España no estaba previsto que se reuniera con ninguna autoridad nacional. En la cúpula empresarial no se pasaba por alto la reciente crisis diplomática entre el Gobierno español y Milei cuando el ministro de Transportes, Óscar Puente, sugirió que el mandatario argentino toma “sustancias”.
Con estos antecedentes, fuentes empresariales de alto nivel, a las que ha tenido acceso Confidencial Digital, aseguran que presidentes y consejeros delegados de las grandes compañías español que se reunieron con el mandatario argentino le pidieron que en ese encuentro no atacara a Pedro Sánchez ni a su mujer.
Transmitieron a la Embajada de Argentina en Madrid, en los preparativos del evento, que no se querían ver involucrados en una campaña contra el Gobierno.
Reconocen en privado que temían, a sabiendas de que no es la primera vez que Milei insulta al Gobierno español, que pudiera parecer que justifican esas posiciones y ser incluidos en la “máquina del fango de Sánchez” junto a PP y Vox.
En cambio, fuentes presentes en el encuentro confirman a ECD que Milei cumplió la petición de los empresarios a puerta cerrada y no atacó en ningún momento al Gobierno de Sánchez. Ni mencionó al presidente del Gobierno. Ni hubo críticas contra medidas de protección del Estado del Bienestar emprendidas por el Ejecutivo español.
El mandatario latinoamericano se centró en explicar su plan económico para Argentina y su interés en contar con inversión exterior, particularmente española, para potenciar el crecimiento y el empleo.
Pese a la polémica, las principales empresas participantes en el encuentro justifican la reunión del sábado de varios ejecutivos españoles con Milei.
“Son habituales estos encuentros con presidentes”, defiende a ECD uno de los directivos que acudió, subrayando la reunión “profesional”, convocada por el Gobierno argentino y que “se habló exclusivamente de economía”. Destaca que las empresas españolas plantearon sus problemas en Argentina. “No nos movemos en el plano político, trabajamos con los gobiernos que nos tocan”, insiste.
Incluso, añade el consejero delegado de una gran multinacional, algunos de los altos ejecutivos que se vieron con Milei le llegaron a trasladar que, sin saberlo, con sus ataques le estaba “haciendo la campaña del fango a Sánchez” porque las críticas que le viene lanzando desde Argentina en los últimos meses le fortalecen políticamente.
El enfado de las principales empresas que se reunieron con Javier Milei, solo unas horas antes de sus palabras sobre la mujer de Sánchez, es mayúsculo. Hasta el punto de que han condenado “unas declaraciones fuera de tono” que no debería pronunciar “un presidente de una nación de visita en España”.
En un hecho insólito, algunas de ellas como Telefónica, Abertis, Proeduca, Santander, BBVA o Naturgy se han alineado con la posición del presidente de la patronal, Antonio Garamendi, quien ha rechazado “de plano” y “profundamente” las declaraciones de Milei llamando “corrupta” a Begoña Gómez en el acto de Vox. Han repudiado públicamente las acusaciones.
“Que no parezca, ni de lejos, que le estamos lavando la cara”, responden a ECD en una las principales compañías que se reunieron con Milei.
Las fuentes empresariales consultadas por ECD no han pasado por alto que hasta el Partido Popular ha rebajado este lunes el tono contra el Gobierno, después de que este domingo tacharan de “hipérbole discursiva” la comparecencia del ministro de Exteriores, José Manuel Albares, tras las palabras de Milei contra Sánchez y su esposa. “El discurso de Milei es, desde luego, una intromisión en política nacional”, afirmó el vicesecretario Institucional del PP, Esteban González Pons.
Fuentes del PP habían puesto el foco en Sánchez, por “no haber dado explicaciones en los casos de corrupción que afectan a su Gobierno, su partido y su entorno”, en lugar de sobre los insultos de Milei y no respaldaron la decisión de llamar a consultas a la embajadora española.
Una estrategia sobre la que ha reculado en las últimas horas la dirección nacional del partido. “[Milei] no puede o no debe, en su primer viaje a España, venir sin saludar al Rey, al Gobierno, al Parlamento y entrar en un acto político de un partido y remover la política nacional”, agregó Pons, que calificó de “espectáculo chocante” la intervención del presidente de Argentina en la convención de Vox en Madrid.
Eso sí, la cúpula de Génova mantiene que “Sánchez quiere convertir a su mujer en una razón de Estado y no lo es”.
