Los desarrolladores han aprendido que hay que basarse en los fundamentales, ser conscientes de cómo es el sistema del país, lo que necesita y regulación del mismo. La clave indica Vargas "está en entender que el almacenamiento no tiene que ser un coste, sino que te puede ayudar a reducir esos costes del sistema derivado de todas las ineficiencias que hay. Dentro del esfuerzo que supone realizar la transición energética, "en España creemos firmemente en el valor que los proyectos de almacenamiento pueden aportar al sistema eléctrico, desde el punto de vista de sostenibilidad y confiabilidad del mismo", apunta Vargas.