Hay una serie de hierbas medicinales que ayudan a combatir el sueño y pueden consumirse como una infusión caliente.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cerca del 40% de la población mundial experimenta problemas para dormir, siendo el insomnio el más común.
El insomnio es la imposibilidad de conciliar el sueño o de reanudarlo. Además, un estudio del American College of Cardiology sugiere que hasta el 8% de las muertes por cualquier causa podrían atribuirse a "patrones de sueño deficientes".
De acuerdo a una publicación del Centro de Investigación sobre Fitoterapia (INFITO) de España, una asociación científica dedicada al estudio y divulgación de la Fitoterapia, existen unas hierbas medicinales que ayudan con los problemas para dormir.
El insomnio representa un riesgo para la salud porque aumenta la probabilidad de padecer enfermedades cardiovasculares, gastrointestinales o hipertensión.
También tiene consecuencias sociales importantes, aumentando tanto el riesgo de absentismo laboral como los accidentes en los puestos de trabajo. Los seres humanos necesitan dormir entre un tercio y un cuarto de su vida.
El sueño es una parte integral de la vida cotidiana. Se trata de una necesidad biológica que permite reestablecer las funciones físicas y psicológicas esenciales para el pleno rendimiento diario.
De todas maneras, hasta hoy es un enigma de la investigación científica en determinadas áreas.
De ser considerado un fenómeno pasivo en el que parecía no ocurrir nada, el sueño pasó a ser considerado un estado de conciencia dinámico en el que se puede tener actividad cerebral igual de activa que en la vigilia.
Durante la vigilia suceden grandes modificaciones en el funcionamiento del organismo, cambios en la presión arterial, la frecuencia cardíaca y respiratoria, la temperatura corporal, la secreción hormonal, entre otras.
El estudio español reveló que la incorporación de las siguientes hierbas medicinales, en infusiones como el té, ayudan a combatir con el insomnio:
Análisis realizados en ratones sobre el comportamiento y aspectos fármaco-toxicológicos de los extractos acuoso e hidroalcohólico obtenidos a partir de los pétalos de la amapola demostraron que reducen la conducta exploratoria y la actividad motora.
Además, actúan sobre otros parámetros comportamentales y de disminuyen el tiempo de inducción del sueño. Tiene, además, un efecto sedante y depresor del sistema nervioso central.
El estudio señala que tanto el aceite esencial de lavanda como su principal componente, el linalol, se comportan como sedantes. Afectan a la neurotransmisión y disminuyendo la tensión arterial.
Ensayos preclínicos realizados sobre ratas demostraron que el aceite esencial de lavanda produce un estímulo olfativo, con cambios en la conducta relacionados con la ansiedad, tales como los movimientos periféricos.
Comúnmente usado para infusiones como el té, se emplea para el tratamiento sintomático del nerviosismo y desórdenes del sueño.
La actuación de las inflorescencias de tilo sobre estados nerviosos es atribuida a los derivados monoterpénicos oxigenados presentes en el aceite esencial (geraniol), ya que disminuyen la motilidad espontánea en ratas.
