Probá estos hábitos y descubrí cuál te ayuda a lograr un sueño revitalizante después de los 40 años.
A medida que pasan los años, mantener un sueño reparador puede convertirse en un desafío mayor, especialmente después de los 40 años. Sin embargo, existen 5 hábitos fundamentales que tenés que mantener para dormir sin problemas y sin interrupciones por la noche.
Estos hábitos promueven el sueño profundo y contribuyen a mejorar la calidad de vida en general. A continuación, te contamos cómo estos simples cambios, pronunciados por el neurofisiólogo Javier Albares a Telva, pueden transformar tus noches y días.
El movimiento físico se revela como un aliado para garantizar un descanso reparador, especialmente después de los 40 años. El neurofisiólogo Javier Albares enfatiza la importancia de contrarrestar el cansancio intelectual con actividad física.
Si bien nuestras jornadas pueden estar dominadas por el sedentarismo, dedicar tan solo 10 minutos 3 veces al día a caminar puede marcar una diferencia significativa en la calidad de nuestro sueño.
Según el neurofisiólogo Javier Albares, moverse más durante el día puede mejorar la calidad del sueño después de los 40 años. (Foto: Unplash)
La relación entre la exposición a la luz y la oscuridad juega un papel fundamental en la calidad de nuestro sueño, según expertos en el tema. Durante el día, es crucial aprovechar la luz natural del sol tanto como sea posible, ya que esto ayuda a regular nuestro ritmo circadiano.
Sin embargo, una hora antes de acostarnos, es necesario reducir gradualmente la luminosidad de nuestro entorno para enviar señales claras a nuestro cerebro de que es hora de dormir.
Según lo señalado por el experto en sueño, disminuir la velocidad gradualmente es fundamental para preparar nuestro cuerpo y mente para el descanso nocturno.
Esta analogía de "sacar primera y llegar a punto muerto" sugiere una transición suave hacia la calma y la relajación al anochecer. Es importante destacar que este proceso no solo aplica a los adultos, sino también a los niños pequeños.
Dos horas antes de acostarte, buscá la calma y la serenidad para preparar el cuerpo y la mente para el descanso nocturno. Sin embargo, las estrategias para relajarse pueden variar según la persona.
Desde tomar un baño caliente hasta escuchar música suave o practicar mindfulness, es importante encontrar lo que funciona mejor para vos. Algunas personas encuentran ayuda en sonidos ASMR para calmar la mente, mientras que otros prefieren las meditaciones guiadas.
Escuchar música suave o practicar meditación pueden ser formas efectivas de preparar el cuerpo y la mente para el sueño. (Foto: Freepik)
Las mujeres, en particular, a menudo se encuentran cargando con las demandas de un estilo de vida cada vez más acelerado. Los creadores del podcast "Sleep Meditation for Women", con un millón de oyentes únicos al mes, señalan que la percepción femenina de la rapidez de la vida y las expectativas de logros han aumentado significativamente.
Dejar de lado la autoexigencia puede ser clave para mejorar la calidad de nuestro sueño. Al liberarnos de la carga de las expectativas poco realistas y la presión autoimpuesta, podemos permitir que nuestro sueño se beneficie.
Es importante reconocer la importancia de cuidar nuestra salud mental y emocional para garantizar un descanso reparador después de los 40 años.
