Esta bebida caliente trae innumerables beneficios al organismo y es fácil de preparar.
Con el inicio de las bajas temperaturas y las olas de frío en el hemisferio sur, las infusiones se convierten en protagonistas por su gran sabor y confort que aportan.
Existe un té poco conocido en Occidente que es la bebida estrella de la cultura japonesa, ya que aporta antioxidantes, vitaminas, minerales y más que refuerzan el sistema inmunológico y limpian el organismo.
Con el boom de la gastronomía asiática en Latinoamérica, el té de matcha se volvió un ingrediente fundamental a la hora de preparar infusiones y postres.
En la antigua cultura china se consumía en grandes cantidades porque era considerado como una medicina. Puede ser identificado por su color verde brillante y es el té verde más consumido fuera de Japón.
El té de matcha aporta una gran cantidad de catequinas antioxidantes al organismo, lo que ayuda a contrarrestar los efectos de los radicales libres y evitar el envejecimiento de las células.
En la misma línea, su contenido en L-teanina tiene efectos relajantes, mejoran la concentración y potencian el estado de ánimo. Su contenido de fibra contribuye a mejorar la salud digestiva y regular los niveles de azúcar en la sangre.
El consumo constante de esta infusión puede traer diversos beneficios al cuerpo como:
Para preparar esta deliciosa infusión y aprovechar todos sus nutrientes se necesitan unos pocos ingredientes: matcha en polvo, agua caliente y leche de cualquier procedencia.