Existen ciertas fórmulas que los diseñadores repiten una y otra vez: el ojo en la carátula, la espalda contra espalda de los protagonistas o el machote con arma en mano son siempre las opciones más socorridas.
Todas tenemos una amiga que llegaba a clase siempre sin los deberes y si no la tienes es que eres tú. Esa amiga te suplicaba que le dejases echar un ojo a tus ejercicios para terminar las dos fallando en las mismas preguntas. En el cine, lo de copiarse del de al lado también ha estado siempre de moda. ]]>