La gran arteria madrileña desde siempre ha sido uno de esos puntos neurálgicos en los que se evidencia el ritmo frenético de esta ciudad donde miles de viandantes se cruzan día y noche. Tiendas, cines, restaurantes, teatros, oficinas, hoteles, cafeterías... conforman la amalgama de negocios que nos hacen deambular por allí constantemente tanto entre semana como los fines de semana con los mejores planes de la ciudad.