Los potenciales cambios que se aplicarán al Sistema de Admisión Escolar (SAE) y el traspaso de establecimientos educativos desde las municipalidades a los Servicios Locales de Educación (SLEP), han sido los protagonistas en materia de educación en el debate público de los últimos meses.
En conversación con la primera edición de Radioanálisis, el académico de la Universidad Diego Portales (UDP) e integrante del Consejo Nacional de Educación, Gonzalo Muñoz, aseguró que el cambio del sistema municipalizado a los SLEP ha tenido “luces y sombras”.
Sin embargo, el experto destacó sus “frutos positivos”, como la mejora en los resultados del SIMCE y el aumento en la tasa de revinculación. “Es importante recordar el contexto en el cual se produjo este cambio, uno de los más importantes, sino el más importante que ha vivido la estructura de la educación chilena del regreso a la democracia y que se puso sobre un diagnóstico que fue bien compartido (…) De que el sistema municipal terminó conspirando contra el objetivo de mejorar la calidad y la presencia de la educación pública en Chile. Eso generó muchos debates, fue muy difícil lograr acuerdos políticos que permitieran sacar esta reforma”, recordó.
“¿Y por qué digo esto? Porque la mochila que hereda este nuevo sistema tiene mucho que ver con ese legado, con un legado de una educación pública que estuvo en situaciones muy difíciles fruto de la municipalización”, indicó.
En esa misma línea, Muñoz sostuvo que la reforma que creó los SLEP, “es una reforma institucional, con las complejidades propias de un cambio de esta envergadura y por tanto, los resultados los vamos a ir viendo poco a poco. Por eso que no tiene mucho sentido esta idea que hemos escuchado en la opinión pública de decir: esta es una reforma que hay que frenar o retroceder”.
Justamente, requerido sobre el devenir del debate político, el académico acusó que hay una “falta, bien transversalmente, de compromiso real con la educación pública”.
“La educación, más bien, se ha transformado en un objeto de trinchera y de sacar réditos de corto plazo cuando en realidad sabemos que la educación es precisamente un proceso de largo plazo y necesitamos acuerdos que le den estabilidad en el tiempo. Eso ha costado mucho, pero esta es una reforma que yo creo que apunta a la dirección correcta, porque precisamente se pensó como un proceso gradual. Estamos recién a la mitad. Llevamos 24 SLEP con los establecimientos educacionales a cargo y tenemos que llegar el 2030 a 70”, advirtió.
Muñoz además se refirió al trabajo que está realizando la comisión de expertos en la que participa y que propondrá reformas al SAE. A su juicio, son necesarios los cambios para mejorar los niveles de satisfacción de las familias, pero recalcó que el problema de fondo está en que se requieren más colegios de buena calidad.
“Necesitamos ir avanzando para que efectivamente las familias puedan elegir los colegios, para que todos los colegios mejoren su calidad para que no tengamos este problema de que muchas preferencias y muchas postulaciones se concentran en pocos colegios. No equivoquemos el foco esencial, el desafío está en mejorar la calidad de la educación pública, mejorar la calidad de todo el sistema educacional, sobre todo al que atiende a la población más vulnerable”, expresó.
