La cumbia, uno de los géneros más populares en América Latina, nació en Colombia, pero con el tiempo ha evolucionado y adoptado características propias de distintos países. En este proceso de transformación, Perú ha jugado un papel clave, aportando elementos que marcaron la diferencia en el desarrollo de la cumbia argentina, uno de los estilos más reconocidos del género tropical en la actualidad.
Aunque hoy la cumbia argentina es emblemática por su ritmo y estilo, pocos conocen la influencia que tuvo la cumbia peruana en su formación. La incorporación de instrumentos como timbales, cencerros, tumbadoras y bongós, inspirados en la música peruana, le dio un sonido único que sigue conquistando al público en toda la región.
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De acuerdo con Lucho Rombolá, integrante del podcast del canal de YouTube Eva TV, la influencia de la cumbia peruana en la cumbia argentina marcó un antes y un después en su evolución. Según Rombolá, antes de la llegada del grupo peruano Karicia en 1991 o de Los Mirlos, la cumbia argentina era "muy básica, de poca percusión, vacía". Sin embargo, con el impacto de la música peruana, comenzaron a incorporarse instrumentos como timbales, cencerros, tumbadoras, bongó, güiro y batería electrónica, lo que transformó completamente el género. "El bajo se hizo más volador, más dinámico, la cumbia tomó otro empuje", afirmó el periodista.
Rombolá también subrayó la necesidad de reconocer el aporte cultural de otras naciones, especialmente en un país donde a menudo se discrimina a ciudadanos de origen extranjero. "En un país donde a veces se mira con discriminación o de reojo a quienes han nacido en otras tierras, debemos pensar mejor las cosas, porque les debemos mucho", destacó, enfatizando la importancia de valorar la influencia de la cumbia peruana en la historia de la música tropical argentina.
Los conductores de Eva TV explicaron que la llegada de las agrupaciones peruanas a Argentina fue parte de un fenómeno migratorio en la década de 1980 y principios de los 90. Durante ese período, una ola de migración interna llevó a habitantes de provincias como Salta, Jujuy, Chaco y Corrientes a establecerse en Buenos Aires, llevando consigo su música tropical. Este movimiento migratorio fue complementado por la llegada de ciudadanos y músicos de países vecinos como Bolivia, Paraguay y Perú, atraídos por la aparente estabilidad económica y la convertibilidad del dólar y el peso en ese entonces.
Entre estos migrantes peruanos se encontraban músicos que, bajo el impulso de empresarios locales, formaron agrupaciones que se convirtieron en íconos de la cumbia argentina, como Karicia, Gilda, Media Luna y Los Charros. Estas bandas dejaron una huella indeleble en el género, marcando un cambio significativo en su evolución y estableciendo un legado que perdura hasta hoy.
