En las últimas horas, el régimen de Bashar al Assad en Siria ha colapsado tras una ofensiva rebelde que ha culminado con la toma de Damasco, poniendo fin a 24 años de gobierno y a una guerra civil que deja más de 500.000 muertos y millones de desplazados. La corrupción y las violaciones de los derechos humanos han sido una constante durante su administración.