Líbano ha denunciado que Israel realizó una serie de ataques aéreos este martes en mitad de una posible tregua que aún no se ha confirmado. Según los medios de comunicación estatales, la aviación israelí atacó tres veces el distrito de Nweiri, y en el primer ataque murieron siete personas y 37 resultaron heridas, según el Ministerio de Sanidad. Los medios de comunicación estatales también dijeron que la zona de Mazraa había sido alcanzada. Las Fuerzas de Defensa de Israel han instado por primera vez a evacuar edificios situados en la zona centro de Beirut , en previsión de potenciales bombardeos que se producirían apenas unas horas de la teórica aprobación de un alto el fuego en Líbano. Un portavoz militar, Avichay Adraee, ha difundido en redes sociales imágenes de los edificios que serían atacados y que las FDI vinculan al partido-milicia Hezbolá. Recomienda la evacuación «inmediata» de los inmuebles y permanecer al menos a 50 metros de distancia. Las fuerzas israelíes han concentrado sus ataques sobre Beirut en la zona sur de la ciudad, considerada un bastión de Hezbolá, y este mismo martes habían lanzado una nueva oleada de «ataques a gran escala». Dentro de la ofensiva terrestre, las tropas han alcanzado el río Litani, un hito inédito desde la retirada del año 2000. Todo ello antes de una previsible interrupción temporal de los ataques, fruto de un alto el fuego al que aún debe dar el visto bueno formal el Gobierno de Benjamin Netanyahu. El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, ha advertido de que tendrá «tolerancia cero» con potenciales violaciones del previsible alto el fuego con Hizbolá y ha llamado a una mayor implicación de la Fuerza Interina de Naciones Unidas para Líbano (FINUL), a la que ha reclamado un despliegue «efectivo» para evitar futuras amenazas. Katz, que ha recibido este martes a la enviada especial de la ONU para Líbano, Jeanine Hennis-Plasschaert, ha avisado de que Israel no permitirá que Hizbolá vuelva a hacerse fuerte ante los «ojos cerrados» de la FINUL, una misión a la que ha involucrado 'de facto' en caso de alto el fuego. El ministro considera que corresponde a los mecanismos de supervisión impedir el contrabando y la fabricación de armas para beneficio del grupo chií, así como el establecimiento de nuevas estructuras desde las que los milicianos puedan seguir suponiendo una amenaza para la zona norte de Israel , informa el Ministerio de Defensa en un comunicado.