ALBACETE, 19 (EUROPA PRESS)
La Fiscalía mantiene la petición de prisión permanente revisable para A.S., acusado de violar y matar a golpes a un amigo con el que convivía en una edificación en ruinas y abandonada a las afueras de Albacete, por un delito de asesinato con alevosía y otro de violación.
Así lo ha narrado este martes la fiscal del caso en la quinta sesión del juicio que se celebra, con jurado popular, en la Audiencia Provincial de Albacete, donde ha explicado detalladamente a los miembros del jurado el motivo de solicitar la prisión permanente revisable y por qué es un asesinato y no un homicidio.
La fiscal ha considerado probado que el acusado actuó de manera sorpresiva al tratar de matar a su amigo, a quien golpeó en numerosas ocasiones con dos piedras en la cabeza hasta causarle, al menos, la inconsciencia.
Acto seguido, lo violó, descartando así la fiscal que la relación fuera consentida, ya que la víctima se encontraba ya en estado de inconsciencia o muerto.
Además, ha señalado que el acusado, en caso de que la víctima hubiera seguido viva durante unos minutos, se llevó su móvil para que no pudiera pedir auxilio, percatándose así de que la víctima fallecería en caso de no estarlo ya tras los golpes en la cabeza.
Asimismo, ha indicado también que tuvo una intencionalidad clara de matarlo pues, según su declaración en dependencias policiales y en sede judicial, el acusado actuó de esta manera después de que la víctima tratara de agredirlo sexualmente. En ese momento, el acusado salió del habitáculo en el que vivían y podría haberse marchado. Sin embargo, según la fiscal, estuvo varios minutos, incluso varias horas, pensando qué hacer. "Podría haberse ido, pero volvió y lo mató", ha apostillado.
Al igual que el Ministerio Fiscal, la abogada de la acusación particular ha solicitado la prisión permanente revisable para el acusado arguyendo los mismos argumentos que la fiscal.
Por su parte, la abogada del procesado ha insistido en que fue un homicidio y ha solicitado a la magistrada que se tenga en cuenta que el acusado confesó lo que había sucedido tras su detención, colaborando con la Policía y la Justicia también tras aceptar los análisis de ADN.
Tras las conclusiones de las partes, la magistrada procederá a someter al jurado popular, por escrito, el objeto del veredicto, a través de diferentes preguntas, con el objetivo de que los miembros que lo componen respondan de forma motivada si el acusado es o no culpable de los delitos.
Una vez establecido el objeto, el jurado deberá designar un portavoz que presidirá y dirigirá las sesiones de deliberación, que serán secretas. Cada miembro deberá responder a las preguntas de forma individual y votar si estima probados o no los hechos y si estiman o no culpable al acusado.
