MADRID, 8 (CHANCE)
Durísimos momentos para el exfutbolista Joaquín Sánchez, que ha sufrido el mayor golpe de su vida. Su padre, Aurelio Sánchez, fallecía este miércoles en El Puerto de Santa María a los 78 años después de varios días ingresado en un hospital de la localidad gaditana tras sufrir un empeoramiento en su estado de salud.
Era el Betis, club de los amores del exjugador -y del que es embajador tras su retirada la pasada temporada- quien anunciaba la muerte de uno de los grandes pilares de Joaquín y una de las personas que más le apoyó en su carrera deportiva.
Ahora ha sido el exfutbolista el que, completamente destrozado, con gafas de sol para ocultar su tristeza y conteniendo las lágrimas a duras penas, ha reaparecido en el tanatorio en el que se están velando los restos mortales de su padre. Y, dando muestras de su grandeza a pesar de su desolación, ha roto su silencio para agradecer el cariño que ha recibido en las últimas horas y dedicar unas preciosas palabras a Aurelio.
"Es un momento complicado como podéis imaginar para toda la familia. Mi padre era el pilar de todos nosotros, junto a mi madre" ha reconociendo, confesando que tanto él como su familia "estamos muy tristes porque era una persona querida por todos nosotros y por todo el Puerto. Y en Sevilla también lo quería mucha gente".
"Era un tío que se hacía querer. Y bueno, desgraciadamente, él se ha marchado y nos ha dejado un legado y un cariño y un amor a todos nosotros. Que eso nos va a durar y lo vamos a recordar toda la vida" ha añadido visiblemente emocionado, agradeciendo el "apoyo de toda la gente que nos ha escrito y nos ha mostrado su cariño. Y desde aquí, pues quería también darles las gracias, que son muchísimas. Gracias por venir".
