Los votantes de izquierda ya tienen la certeza de cómo serán las alianzas electorales en cada municipio de España. El viernes cerró el plazo para el registro de las coaliciones y el mapa ha quedado definitivamente articulado: Podemos e Izquierda Unida consolidan la confluencia engrasada en los últimos años y concurrirán juntos en diez de las 12 autonomías que revalidan sus gobiernos el próximo 28 de mayo, en la mayoría de plazas junto a Alianza Verde. La foto de unidad queda empañada en dos lugares de vital importancia electoral: Madrid y la Comunitat Valenciana, donde Más Madrid y Compromís se negaron a un pacto desde el primer día.
A pesar de la fragmentación paulatina del espacio político a la izquierda del PSOE en los últimos años, especialmente a partir de las escisiones de Podemos, la formaciones que dirigen Ione Belarra y Alberto Garzón se han unido en estas elecciones en más comunidades que nunca, con pactos en algunas autonomías y capitales de provincia donde los dos espacios nunca habían concurrido, como Murcia o Cantabria. A la alianza entre Podemos e IU se ha sumado en la gran mayoría de sitios Alianza Verde, el partido ecologista de Juantxo López de Uralde.
En total, Podemos ha alcanzado pactos en más de 1.500 municipios con otras fuerzas, en 1.300 con Izquierda Unida. La federación de Garzón ha registrado hasta 1.040 coaliciones en diferentes candidaturas en solitario en otros 500 municipios, aunque este número puede ampliarse durante esta semana, cuando acaba el plazo para registrar las listas. Desde los diferentes espacios han celebrado esta nivel inédito de alianzas electorales que tanto en Podemos como en IU lamentan que no se haya podido extender a algunos territorios clave como la Comunitat Valenciana o Madrid.
Las dos formaciones han alcanzado pactos en diez comunidades. De ellas, suman a Alianza Verde en la Comunidad de Madrid, Extremadura, Castilla-La Mancha, la Comunitat Valenciana y la Región de Murcia. Ha habido dos territorios donde ha sido imposible la unidad entre las dos formaciones, como Asturias y Aragón, donde desde la irrupción de Podemos nunca hubo unidad con Izquierda Unida. En la región norteña, los de Belarra además viven un duro proceso de división interna, con la candidata, Covadonga Tomé, enfrentada a la dirección. Allí, Izquierda Unida concurrirá en coalición con Más País. En Aragón, Podemos alcanzó un pacto con los de López de Uralde. En esta última región, además, la formación se juega su presencia en el Gobierno autonómico, donde su candidata, Maru Díaz, comparte gabinete con el PSOE, la Chunta Aragonesista y el Partido Aragonés.
Izquierda Unida ha llegado a acuerdos para ampliar sus coaliciones en territorios como Castilla-La Mancha, donde se ha incorporado Equo, o en las islas Canarias, donde irán juntos con la formación Sí se Puede.
Solo hay una comunidad donde todo el espacio político de la izquierda a la izquierda del PSOE concurrirá unido. En Navarra, la marca electoral Contigo Navarra-Zurekin Nafarroa agrupará a Podemos, Izquierda Unida, Batzarre, Alianza Verde, Verdes Equo y un grupo de independientes, un experimento de unidad cocinado en verano, al calor del inicio del proyecto Sumar, de Yolanda Díaz. La candidata, Begoña Alfaro, de Podemos, fue la única líder territorial de ese partido que estuvo el pasado 2 de abril en el lanzamiento del proyecto político de la vicepresidenta segunda del Gobierno, en el polideportivo Magariños de Madrid.
Esa unidad no ha sido posible en las dos comunidades que más votos movilizarán en las próximas autonómicas (Catalunya, Euskadi, Galicia, Andalucía y Castilla y León solo celebrarán municipales). En esos dos territorios, la negativa de Más Madrid por un lado y de Compromís por otro ha hecho imposible una candidatura de unidad de la izquierda, y los electores de ese espacio tendrán que elegir entre esas formaciones y la lista que conformarán Podemos, Izquierda Unida y Alianza Verde.
En Madrid, el partido que dirige Mónica García, fundado por Manuela Carmena e Íñigo Errejón tras su salida de Podemos, entendió que la unión con los de Belarra les restaba identidad en una región en la que han conseguido consolidarse como segunda fuerza política y primera de todo el espacio de la izquierda, por encima del Partido Socialista, tanto a nivel autonómico como en la capital. La candidatura de Podemos e IU luchará, según todas las encuestas, por sobrepasar el umbral del 5% que les garantiza una mínima representación parlamentaria.
En esa comunidad parece difícil que la izquierda pueda gobernar ante el liderazgo de la presidenta, Isabel Díaz Ayuso, pero la pelea en el Ayuntamiento es más ajustada, y la izquierda podría depender de la entrada de Roberto Sotomayor en ese consistorio para conseguir arrebatarle a José Luis Martínez Almeida el Gobierno.
La situación es mucho más delicada en el litoral, donde el Gobierno del socialista Ximo Puig, sostenido por el Pacto del Botànic, que firmó con Compromís y Podemos, podría depender de un escaño. La lista que encabezará el actual vicepresident Héctor Illueca también oscila en las encuestas en el 5% y su presencia en esa cámara es condición para que ese pacto se pueda revalidar.
Con este escenario, la presencia de Yolanda Díaz en la campaña cobra una relevancia especial. La ministra de Trabajo estudia a qué lugares ir, aunque ha manifestado que su voluntad es hacer campaña en aquellos sitios donde hay candidaturas de unidad. Esta condición aleja la posibilidad de actos por las opciones de Unidas Podemos en Madrid o València, donde su presencia podría impeler la movilización suficiente por ese espacio como para superar ese umbral necesario.
Es lo que considerado uno de sus aliados en el Congreso, Antón Gómez-Reino, de Galicia en Común, este mismo martes. “Creo que es absolutamente clave que Sotomayor entre en el Ayuntamiento y Alejandra Jacinto en la comunidad. Qué les voy a decir de Illueca, es clave su entrada con fuerza para blindar el Gobierno de Valencia”, ha dicho en rueda de prensa preguntado por su opinión sobre si Díaz debería hacer campaña en esos dos puntos.
Este domingo, en una entrevista en La Sexta, la ministra no fue clara sobre la papeleta que depositará en Madrid el 28 de mayo, con una respuesta que ha abierto las sospechas de que apoyará a Mónica García, la líder de la oposición a Ayuso, que a diferencia de Jacinto sí estuvo en la presentación de Sumar el 2 de abril.
Podemos envió hace varias semanas un documento al equipo de la vicepresidenta segunda con el cronograma de actos principales para facilitarle que haga campaña en los lugares que estime conveniente, aunque según fuentes de esa formación aún no han recibido respuesta.
Yolanda Díaz estará seguramente en algunos de los actos de campaña que En Comú Podem celebrará en Catalunya. Allí no se celebran autonómicas, pero la alianza electoral entre Podem y los comunes de Ada Colau, más que consolidada, concurrirá en Barcelona y los principales ayuntamientos de la región. Este mismo sábado, la vicepresidenta segunda estará en un acto en la capital con la alcaldesa, igualada en las encuestas con el candidato de Junts, Xavier Trias, y el del PSC, Jaume Collboni.
El portavoz de En Comú Podem en el Congreso, Jaume Asens, y la líder de esa coalición en Catalunya, Jéssica Albiach, acudieron el pasado fin de semana a la inauguración de la Fiesta de la Primavera de Podemos, como una forma de trasladar la voluntad de la coalición de “trabajar por una candidatura unitaria” de cara a las elecciones generales entre Podemos y los diferentes partidos que participan en la conformación de Sumar.
Podemos e Izquierda Unida sí concurrirán juntos en casi todas las capitales de provincia, en 39 de las 50 que se reparten por todo el territorio español. Además, en aquellas ciudades donde IU no ha alcanzado un pacto o ni siquiera se presenta (como en Pontevedra), Podemos sí ha llegado en su mayoría a acuerdos electorales con Alianza Verde.
En algunas de estas ciudades, sí han sido posibles candidaturas de unidad más amplia. Así será en Catalunya, con la marca En Comú Podem o Barcelona en Comú en la capital catalana, donde el partido de Colau engloba desde el principio a miembros de Podem entre una amplia amalgama de formaciones y colectivos. Pero también en Pamplona, con la misma marca con la que la izquierda irá unida a nivel autonómico, o en Ciudad Real, donde Podemos e Izquierda Unida han ampliado su pacto a Más País, Alianza Verde y Verdes Equo.
La incorporación de Más País a pactos con Podemos, imposible en Madrid a nivel regional o municipal, sí se ha gestado en las capitales de provincia andaluzas Sevilla, Córdoba y Málaga, donde se repetirá el experimento de Por Andalucía, que incorpora también a Iniciativa del Pueblo Andaluz y que parte con el errático precedente de las últimas andaluzas. En ese pacto no está el proyecto de la fundadora de Podemos Teresa Rodríguez, Adelante Andalucía, que también rechazó la confluencia en las andaluzas al considerar que la unidad con el partido de Belarra les restaba a la hora de mantener una identidad política de corte puramente andalucista.
En Cádiz estuvo a punto de darse una coalición que incluyese en la misma papeleta a ese espacio y a Podemos, pero se frustró en el último momento. Las negociaciones se mantuvieron prácticamente hasta el último día antes del cierre del plazo para registrar las listas, pero los de Belarra decidieron no participar al considerar, según afirman fuentes del partido, que las opciones que les ofrecían, con el séptimo puesto de salida en las listas, no eran suficientes como para garantizarse representación en la próxima legislatura.
En esos días también se frustró el pacto que se venía gestando en Rivas Vaciamadrid con toda la izquierda, una plaza de importancia simbólica (Izquierda Unida gobierna ininterrumpidamente allí desde 1991) y que se había perfilado como un posible lugar idóneo para un acto de campaña de Yolanda Díaz. La dirección regional del partido decidió salirse el jueves de ese pacto, que según las fuentes consultadas ya se había firmado a nivel local, por la negativa de Más Madrid a alcanzar un pacto más amplio a nivel regional. En Podemos entienden que la ruptura de ese pacto no perjudica las opciones de la izquierda en esa ciudad, toda vez que en las pasadas elecciones hubo dos listas y aun así ganaron las elecciones.
