Con la inclusión de las mujeres y la diversidad de género como bandera, las empresas buscan lograr una transformación de raíz de cara al futuro
Desde hace ya varios años, la discusión sobre la inclusión y la diversidad en las empresas es un tema corriente. Y es que, en la Argentina, sólo el 16% de los puestos directivos son ocupados por mujeres. Sin embargo, el desafío de incluir y acompañar a las mujeres dentro de las empresas, no se trata únicamente de políticas socialmente correctas, sino que las medidas tienen impactos en el negocio. Así quedó reflejado en el evento Mujeres & Diversidad, organizado por El Cronista Comercial y la revista Apertura este jueves en La Rural.
"La diversidad trae innovación, una cultura diferente, flexibilidad, y acelera los procesos de cambio. Es una ventaja competitiva que se tiene que medir como un negocio porque tiene un impacto directo sobre él. No se trata únicamente de una política de marketing socialmente correcta", reconoció Cristian Cetera, director de Recursos Humanos de General Motors Sudamérica.
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La diversidad de género, y la participación de las mujeres en altos cargos resultan indispensables para el funcionamiento diario de las empresas. Así lo expuso Josefina Hernández Gazcón, directora de Legales, Negocios, Central Andean and South y Asuntos Públicos, de American Tower para Argentina, Paraguay y Chile: "Las mujeres aportamos mucho, sin perder las habilidades duras, mejoramos la escucha, la paciencia y la empatía dentro de la empresa y hasta a veces nos permitimos ser simpáticas y amables".
Cristian Cetera, director de Recursos Humanos de General Motors Sudamérica.
Por su parte, Johanna Moreno Andrade, directora Global de Relaciones con Competidores de Dow, reconoció que debido a que este movimiento se viene desarrollando desde hace varios años, "hoy en día tenemos muchas más mujeres en posiciones de liderazgo". A su vez, contó que hace 10 años había solo una mujer en las mesas de negocios y que no tenían poder de decisión, mientras que, en la actualidad, de los cinco puestos de negocios que hay en Dow, cuatro son ocupados por mujeres.
De esta manera, Moreno Andrade reconoció que "las empresas se dan cuenta de que sus números mejoran cuando son más inclusivas y diversas. De hecho, está demostrado que las empresas que tienen más mujeres y mayor diversidad de género perciben mayores ganancias".
Cecilia Bulleraich, Manager de Adquisición de Talento y Cultura de Massalin, que comentó que el propósito de Philip Morris es crear un futuro libre de humo, reconoció también que las empresas necesitan "líderes que cambien su forma de pensar". Añadió, además, que "teniendo en cuenta que queremos llevar adelante una gran transformación, tenemos que desarrollar un pensamiento que sea de inclusión y diversidad".
Asimismo, Bulleraich explicó que la principal problemática en la que trabajarán es en el número de mujeres que ocupan cargos gerenciales dentro de la compañía: "apuntamos a que haya un número representativo de mujeres en cargos gerenciales, pero no solo en la Argentina, sino en el mundo", sostuvo.
Esta posición también la compartió Moreno Andrade, ya que expuso que en Dow Argentina hay un 40% de mujeres que ocupan cargos directivos, y el objetivo es que, para el 2030, este porcentaje suba hasta el 50%.
Certera, por su parte, reconoció que la cuestión de la diversidad es un eje fundamental en las propuestas de valor que buscan las nuevas generaciones a la hora de aceptar un empleo: "No es un requisito cosmético para estas generaciones, es un requisito fundamental, al igual que los compromisos en sustentabilidad o la proyección de la carrera".
Josefina Hernández Gazcón, directora de Legales, Negocios, Central Andean and South y Asuntos Públicos de American Tower para Argentina, Paraguay y Chile
En esta línea, Moreno Andrade explicó que la creación de una agenda de diversidad genuina, atada a la realidad local de cada país, se vuelve necesaria tanto para la atracción como para la retención de talentos.
"Para impactar a los talentos, tenemos una serie de objetivos. Promovemos el bienestar mediante programas y capacitaciones para generar seguridad psicológica; impulsamos la diversidad y fomentamos la inclusión cuidando la representatividad de mujeres en cargos gerenciales", comentó Bulleraich.
Según Hernandez, en la Argentina, todavía no hay una homogeneización del crecimiento constante y sostenido para las mujeres dentro de las compañías. "Si bien hay cada vez más mujeres que acceden a cargos ejecutivos, su continuidad no siempre está asegurada, por lo que las empresas tenemos que trabajar en los planes de sucesión".
Sin embargo, Bulleraich explicó: "Tenemos instancias en las que revisamos los talentos dentro de la organización y vemos las necesidades que tendrá el negocio a futuro, y si bien muchas veces cumplimos, también a veces sucede que las necesidades de negocio cambian, la persona pierde interés o la posición que estaba vacante ya no lo está".
