Mrashall Glickman lleva más de 20 años asociado a la Euroliga, competición de la que se hará cargo de forma interina mientras se busca a un
CEO definitivo a lo largo de este año. A pesar de la caducidad de su nueva responsabilidad como mano derecha de
Dejan Bodiroga, el reputado ejecutivo asegura en conversación con
The Athletic que tiene ante sí un
"lienzo en blanco" para proponer soluciones a problemas, nuevas ideas y cambios organizativos.
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