Ante la contaminaci?n del agua en la cuenca del Atoyac, los productores del campo est?n destinando m?s recursos para el riego de sus cultivos, factor que est? impulsando un aumento de precio de los productos agr?colas en la regi?n de Puebla y Tlaxcala.
De acuerdo con los resultados preliminares de un estudio diagn?stico en el que participan integrantes del Instituto de Investigaciones en Medio Ambiente Xabier Gorostiaga (IIMA) de la Universidad Iberoamericana Puebla e investigadores de la Universidad de Edimburgo, los sembrad?os de la regi?n ocupan 24 por ciento de toda el agua subterr?nea que se extrae anualmente.
Los agricultores mencionan que se ha reducido la accesibilidad al agua en pozos. A ello, se suman el cambio en las precipitaciones y los periodos de sequ?a, factores que han complicado los procesos de siembra.
Valentina Campos Cabral, directora del IIMA, destac? que en el estudio se encontr? que las comunidades que se encuentran en zonas rurales de la cuenca del Atoyac presentan menos escasez que en las zonas periurbanas o urbanas.
?En zonas urbanas o periurbanas, se reporta falta de infraestructura y distribuci?n desigual. La percepci?n de la calidad del agua tambi?n var?a dependiendo de la disponibilidad de pozos y la cercan?a a los cuerpos de agua?, apunt?.
Ante el problema de contaminaci?n en la cuenca del Atoyac, ciudadan?a, gobiernos y empresas tienen percepciones distintas en cuanto a disponibilidad y calidad del agua en la zona, por ello, la vinculaci?n es fundamental para una gobernanza democr?tica, destac? la investigadora.
La investigadora de la Ibero destac? que todas las comunidades de la zona del Atoyac consideran que el acceso al agua debe ser gratuito, aunque tambi?n admiten que se deben establecer cuotas para el mantenimiento de infraestructura.
?Hay una desorganizaci?n que impacta en el abasto de cantidad y en tiempo. Los pobladores destacan los esfuerzos locales para regular los procesos de contaminaci?n, identificar las fuentes de emisi?n y eliminarlas, as? como para restaurar espacios erosionados. Hay una identificaci?n muy clara de que hay cambios en la precipitaci?n, en la temperatura? Eso es resultado de la acci?n humana?, detall?.
En su oportunidad, Romeo Salda?a V?zquez, investigadora del IIMA de la Ibero Puebla, como parte de su participaci?n en la investigaci?n, constat? que las organizaciones civiles han encontrado cambios significativos en disponibilidad y calidad del agua con base en la zona.
En las ciudades se percibe agua contaminada y con malos olores, mientras que a las comunidades rurales les impacta en el precio de los productos agr?colas que se cultivan y se venden en la regi?n metropolitana de Puebla y Tlaxcala.
De la misma forma, el investigador detect? la existencia de un bajo suministro de agua e irregularidades en su distribuci?n, lo que provoca conflictos internos en las poblaciones que ocupan el vital l?quido y que est?n cerca de los puntos de contaminaci?n.
El investigador explic? que se requiere de un proceso de gobernanza efectiva con la participaci?n de todos los actores sociales y que sus consideraciones y puntos de vista sean incluidos en la toma de decisiones.
?Es fundamental generar y acceder a la informaci?n de manera abierta y permanente. Es fundamental poner el bien com?n como fin ?ltimo para resolver las brechas de gobernanza?, apunt?.
El estudio se llev? a cabo mediante una serie de entrevistas a cuatro perfiles de personas vinculadas con la cuenca: pobladores, servidores p?blicos, organizaciones civiles y empresas. Los participantes fueron habitantes y trabajadores de localidades de San Andr?s Cholula y Juan C. Bonilla, as? como de La Resurrecci?n, Valle Para?so y Azumiatla de Puebla capital. De Tlaxcala se entrevist? a personas de Espa?ita, Tepetitla y Nativitas.
CHM