Como no hace mucho, el Barça vuelve a contar con un delantero centro que le resuelve partidos. Con un
Lewandowski imperial, que sabe marcar de cualquier forma y en cualquier posición. Ante el
Mallorca, el internacional polaco se sacó de la chistera un disparo de rosca que, a los veinte minutos, nadie imaginó sería de oro.
Xavi cuenta con un formidable Pichichi, pero también con un portero magnífico.
Ter Stegen, que volvió a dejar la puerta a cero, desarmó a los locales atajando un gol a bocajarro. Las áreas dictaron sentencia esta vez.
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