La ma?ana del 5 de octubre de 2016, Sthefan?a, la esposa del Maestro Jos? Encarnaci?n, me llam? alarmada: ?Quieren matar a mi marido?, me dijo. ?Una turba est? afuera con machetes y palos. Traen gasolina. Quieren quemar su taxi y luego quemarlo a ?l.
Con esta imagen, una muestra de la barbarie que recorre la vida de los mexicanos, comienza el m?s reciente trabajo de Emiliano Ruiz Parra: Golondrinas. Un barrio marginal del tama?o del mundo (Debate, 2022). El t?tulo alude a una colonia en Ecatepec, al norte de la Ciudad de M?xico. ?En el imaginario mexicano, Ecatepec es el infierno: donde matan a las mujeres, se roban a los ni?os y los pobres sufren su pobreza. Ecatepec significa la otredad, el espejo al que no queremos asomarnos?, escribe Ruiz Parra. Las cifras avalan lo dicho. En este lugar, con un mill?n 660 mil personas y una densidad de 10 mil 500 personas por kil?metro cuadrado, se denunciaron, en dos a?os, 52 mil robos con violencia y 28 mil robos de veh?culo. Entre 2015 y 2019 mataron a mil 258 mujeres. El 40 por ciento de sus habitantes vive por debajo de la l?nea de pobreza, en asentamientos irregulares, algunos construidos sobre ductos de gas y bajo cables de alta tensi?n.
La espl?ndida cr?nica de Emiliano Ruiz narra los or?genes del asentamiento en estos barrios, el modo como los fraccionadores enganchan a la gente para comprar terrenos de 60 metros cuadrados, muchas veces en un ejido, adquiriendo ?deudas impagables con bancos especializados en la usura a las personas m?s pobres?. A trav?s de distintas voces, a lo largo del libro se plantea el c?rculo vicioso y el enga?o al que est?n expuestos los vecinos con tal de hacerse de un patrimonio, un pedazo de tierra que, tras una vida de pagos mensuales y esfuerzos desmedidos para levantar un techo, aunque sea de l?mina, nunca ser? de su propiedad. Los habitantes de Golondrinas son, adem?s, v?ctimas de lo que se conoce como pol?tica clientelar, esa forma de embaucar a la gente con falsas promesas a cambio del voto, sin importar el partido en turno. ?Hay esa explotaci?n detr?s, de fondo?, comenta Ruiz Parra. ?Uno desear?a que a los gobiernos realmente les importara cambiar la vida de esta gente. La sociedad mexicana cada vez tiene m?s hambre y sed de cambio y ojal? en esa b?squeda se pueda visibilizar una realidad de pobreza urbana, de marginalidad urbana que le cuesta muy cara a la gente que vive ah??.
Esta pol?tica clientelar es un modus operandi que ha prevalecido pr?cticamente en todo el territorio y, al parecer, no es privativo de alg?n partido o ideolog?a. ?La experiencia concreta de Ecatepec es que PRI, PAN, PRD, Morena, todos los partidos que han gobernado all? han seguido esa pr?ctica?, afirma Ruiz Parra. ?Creo que la ?nica manera de romper esa inercia es con grandes inversiones p?blicas, en universidades, escuelas, caminos. Mientras no haya esa decisi?n de invertir en la gente, todos est?n m?s o menos condenados o incentivados a repetir un esquema, a ser espiritualmente priistas aunque tengan otros colores?.
Entre los cap?tulos m?s perturbadores de Golondrinas est? el que se refiere a la violencia, en espec?fico contra las mujeres. Si en la mayor parte del pa?s es una amenaza que nos mantiene en vilo, en esta zona es una realidad persistente, forma parte del d?a con d?a. ?La violencia domestica, intrafamiliar es muy fuerte?, dice Ruiz Parra. ?Ah? esta el machismo, el patriarcado. Algunas mujeres son sobrevivientes de feminicidio. Una escena que me impresiona es que si no tienes drenaje, tienes que ir al ba?o al terreno bald?o y ah? te est?n esperando los violadores. A eso hay que sumar las estrategias de sobrevivencia, cuando la gente se dedica a robar para subsistir. Y finalmente la presencia del crimen organizado. Todo esto con el com?n denominador del abandono del Estado. A ninguna autoridad le importa un muerto m?s en Ecatepec?. A pesar de todo, son las mujeres quienes se ocupan de que la vida en el barrio mejore en todos sentidos. En su libro, Ruiz Parra las valora como el verdadero sost?n del lugar y sus testimonios ocupan un lugar preponderante. ?Son ellas quienes hacen comunidad, construyen con sus propias manos, educan, trabajan. Los maridos, a veces alcoh?licos, apenas consiguen trabajo uno o d?as por semana y no pueden garantizar un ingreso m?nimo?.
?Estas comunidades, de las que existen miles en el Estado de M?xico, est?n excluidas del modelo de desarrollo del pa?s. Sus habitantes han sido abandonados a su suerte y exprimidos como reservas de mano de obra barata, masas para los m?tines y votos para las elecciones?, dice Ruiz Parra. La situaci?n se extiende m?s all? de nuestro pa?s: Beijing, Lagos o Cochabamba, se asienta en el libro, son unos cuantos ejemplos de este fen?meno. Invasiones de tierras, autoconstrucci?n, relaciones clientelares con pol?ticos o mafias criminales, lucha por el agua, el drenaje, la electricidad y el papel de las mujeres en la sobrevivencia de estas comunidades, se visualiza como el destino de gran parte de la humanidad. Seg?n el Banco Mundial, ?la pobreza urbana se convertir? en el problema m?s significativo y pol?ticamente m?s explosivo del siglo XXI?.
En el cap?tulo ?Campo de concentraci?n? ?alusi?n a Giorgio Agamben, quien se refiri? a estos asentamientos como el campo de concentraci?n moderno? el autor de Golondrinas advierte que el slum o barrio marginal es el futuro del mundo. ?Para 2025 habr? m?s gente en los barrios que en el campo y en 2050, cuando seremos casi 10 mil millones de habitantes en la Tierra, la mayor?a vivir? en barrios marginales del Tercer mundo?.
?Emiliano Ruiz Parra, actual titular de la Unidad de Investigaciones Period?sticas de Difusi?n Cultural de la UNAM, entrega un trabajo period?stico basado en testimonios y cr?nicas: ?Yo me hice periodista como muchos, en peri?dicos?, apunta. ?Fui diarista, y eso me oblig? a reportear, investigar, abordar a desconocidos. Sent? la necesidad de trabajar con la cr?nica, con un tema que fui descubriendo y que era un gran tema de este pa?s, el de la periferia, y hacerlo desde el recurso que yo ten?a, la escritura y el reporteo. Adem?s, mi proyecto de vida siempre fue la escritura?. Pero Golondrinas est? atravesado por un relato m?s ?ntimo, una historia personal donde figuran dos personajes: Cuauht?moc Ruiz y Carmen Parra. Sobre este cap?tulo, Emiliano comenta: ?El libro tambi?n fue una manera de reencontrarme con mi infancia, con mis pap?s. Record? cuando me llevaban a las asambleas, no a Golondrinas, pero s? a otros barrios igualitos. Eran militantes revolucionarios de izquierda?.
En medio de la vor?gine editorial, se agradece la publicaci?n de un libro que nos habla de una realidad que acaso no alcanzamos a percibir en toda su dimensi?n. La pertinencia de este trabajo publicado tras dos a?os de pandemia, cuando los problemas pol?ticos, sociales y econ?micos se han exacerbado, nos pone en guardia sobre un futuro lamentable para gran parte de la humanidad y la urgencia de combatir los vicios de pol?ticos embusteros y l?deres serviles, de usureros y defraudadores. Las cr?nicas de Ruiz Parra sorprenden y sobrecogen al lector porque lo confrontan con una realidad brutal; advierten de la desesperanza y la zozobra en la que viven y vivir?n millones de personas en un futuro no tan lejano y, al parecer, inmutable. Golondrinas nos invita a hacer un alto en el camino y repensarnos como especie en un planeta que se empobrece, se precariza y se sobrecalienta. ?Creo que mi provocaci?n es modesta?, dice Ruiz Parra. ?Los periodistas, al menos yo y muchos que conozco, escribimos con la esperanza de llamar la atenci?n, visibilizar algo, conmover. Lo que quiero es que los escritores, los periodistas que son de ah?, se animen a hablar, nos cuenten qu? significa vivir en Ecatepec, vivir en Neza. Ahora, que el gobierno pueda hacer algo, ojal?. Uno no sabe cu?l es el alcance que puede tener un libro, yo desear?a que s??.
?AQ