Empatía máxima, pero con reproches. El expresidente de la Generalitat fugado a Bélgica, Carles Puigdemont, ha valorado desde su cuenta de Twitter el hecho de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la ministra de Defensa, Margarita Robles, hayan sido víctimas también del programa Pegasus, como ha desvelado el Ejecutivo este lunes.
«La violación de la intimidad de Sánchez y Robles es un crimen gravísimo que amenaza la democracia. Mi solidaridad hacia ellos, como víctimas, y mi máxima exigencia hacia ellos, como responsables de no haber hecho nada hasta el estallido del 'catalangate'», ha asegurado desde su cuenta de Twitter el expresidente catalán.
Además, el líder independentista ha lamentado que la Moncloa haya tenido que esperar a que hubiera una infección con Pegasus en los teléfonos de Sánchez y Robles para considerar «que es un asunto de extrema gravedad y para investigarlo». «Cuando lo denunciamos los catalanes no merecíamos tanta consideración«, ha añadido en un segundo tuit.
«Queda certificado el espionaje contra el independentismo»
También se ha referido a ello en un mensaje en Twitter el secretario general de Junts, Jordi Sànchez, que ha asegurado que el hecho de que el teléfono de Sánchez haya sido espiado «no resta ningún motivo para seguir pensando que las cloacas del Estado español están detrás del CatalanGate«. »En todo caso hoy queda certificado el espionaje contra el independentismo. Más que nunca comisión independiente de investigación«, ha reclamado Sánchez.