Después de culminar la torre de María e inaugurar por todo lo alto una nueva estrella a 138 metros de altura, la Sagrada Familia prevé un calendario de obras para 2022 en el que «si la situación evoluciona de manera positiva» se podrán terminar dos nuevas torres: las de los evangelistas Lucas y Marcos.
En 2019 ya se avanzó que las cuatro torres de los evangelistas estarían listas en 2021 e incluso se organizó una jornada de puertas abiertas para exhibir los cuatro metamorfos, un ángel, un león, un buey y un águila, que debían coronarlas. La pandemia, sin embargo, lo ha puesto todo patas arriba y el calendario de obras previsto ha quedado en papel mojado.
En este sentido, la Junta Constructora de la Sagrada Familia ha mostrado su deseo de finalizar la torre de Jesucristo en 2026, centenario de la muerte de Gaudí y fecha inicialmente prevista (y descartada) para finalizar las obras. Todo dependerá, sin embargo, del «progreso de la previsión de visitantes». Este año, de momento, se prevé elevar tres niveles de la torre de Jesucristo.
Además, según la Sagrada Familia 2022 será el año en el que se iniciará la conservación y limpieza de la fachada del Nacimiento, la más antigua del templo y oscurecida por el efecto del paso del tiempo y la contaminación. Si las previsiones de los constructores de la basílica, el monumento más visitado de Cataluña, se cumplen, a final de este año estarán acabadas tres de las cinco torres centrales. Aún faltarán por alzar del todo las dos torres de los evangelistas Mateo y Juan, la torre de Jesucristo y las cuatro torres de la fachada de la Pasión
