Hacía tiempo que no se veía un torneo del Circuito Europeo de golf con tanta afluencia de jugadores españoles en los primeros puestos de la clasificación. En concreto son cuatro los que están situados entre los seis primeros del Mallorca
Open y todos ellos cuentan con opciones reales de triunfo. Para ello deberán esperar que el danés Jeff Winther no tenga otro día de máxima inspiración como el de hoy, en el que repitió su tarjeta inicial de 62 golpes para un total de (-15).
Aunque el nórdico no tiene aún ningún triunfo en su palmarés, se ve que le ha tomado el pulso a este recorrido de Santa Ponsa I, en el que quen inscrito su nombre en el palmarés nombres tan importantes como Seve Ballesteros o Miguel Ángel Jiménez en épocas pasadas. En cuanto el viento dejó de molestar, el jugador de Gladsaxe de 33 años se soltó en calles y greens para embocar desde todos los rincones con un final espectacular de tres birdies seguidos que le hizo ruborizarse ante los inhumano de su actuación.
Los españoles, no obstante, nunca le perdieron la cara al liderato. Durante buena parte de la jornada se fueron alternando en el cabeza, empezando por el sorprendente Pep Anglés (-11), que puede arreglar la temporada casi sin quererlo. Después de un octavo puesto en Kenia en el mes de marzo no había vuelto a verse en el top 10 ni de cerca. Falló diez cortes de los siguientes 17 torneos que jugó, pero al final ha obtenido la recompensa a su paciencia. «Me juego el año mañana y mi mejor arma es que no tengo expetativas para esta última ronda. He trabajado muy bien en las últimas semanas y lo que venga será un bono con el que no contaba», explicó el catalán desde la quinta plaza.
Un puesto más atrás se encuentra Sebas García Rodríguez, que también busca su primer éxito desde la consistencia de las últimas semanas. No obstante, a él le da la sensación de que sus golples se marchan para todos los lados. «He jugado bastante bien y el resultado así lo demuestra (-10) aunque tengo que comprobar cuantas calles he cogido, porque he hecho muy buenas recuperaciones», indicó el madrileño. Ya dentro del podio se encuentra Álvaro Quirós (-12), que con su sinceridad habitual incidió en que «sé que ahora mismo me estoy jugando la tarjeta para el año que viene y que no denerí haber dejado los deberes para el final de temporada, pero es que ahora estoy mucho más centrado que en el mes de mayo. Siento que ya me están saliendo las cosas como yo quiero». El gaditano, con siete triunfos en su palmarés, es el más experto de los de arriba y debería hacer prevalecer su condición por delante del danés y de Jorge Campillo (-13), que está a dos impactos y quiere presionar al líder con la calidad de sus golpes de salida, siempre biem colocados en la calle. «He jugado muy bien y ojalá pueda repetir otra ronda como la de hoy mañana. Las condiciones me gustan, con poco viento, para poder atacar las banderas y así buscar un nuevo triunfo», que sería el tercero para el cacereño en tres temporadas
consecutivas.
En cualquier caso, mañana los cuatro contarán con el apoyo de un público que estaba ansioso de que el golf de alta competición volviera a Baleares. Y, por supuesto, de que se pueda reeditar un triunfo nacional en Mallorca, algo que no sucede desde el logrado por Chema Olazábal en Pula Golf en 2005.
