No está claro si el gobierno tiene suficientes votos en ambas cámaras del Congreso para que se apruebe el proyecto de ley.
El Gobierno de México quiere priorizar la energía hidroeléctrica suministrada por una empresa de servicios públicos sobre la generación eólica y solar de propiedad privada mientras la nación reestructura su red eléctrica, dijo la secretaria de energía, Rocío Nahle.
El país busca recortar la participación del sector privado en la generación de electricidad de 62 al 46 por ciento, dijo Nahle durante una conferencia de prensa con el presidente Andrés Manuel López Obrador.
El gobierno nacionalista de México busca revertir la liberalización previa del sector y volver a un modelo de energía pesada de combustibles fósiles administrado principalmente por el Estado, en un intento por limitar el poder de las empresas extranjeras y reducir los costos de electricidad para los consumidores.
El proyecto de ley que López Obrador presentó al Congreso el 30 de septiembre exige un cambio constitucional para otorgar más poder a la estatal Comisión Federal de Electricidad.
No está claro si el gobierno tiene suficientes votos en ambas cámaras del Congreso para que se apruebe el proyecto de ley, y los tribunales han bloqueado proyectos de ley similares en el pasado. Aun así, el esfuerzo está alarmando a las asociaciones de energía eólica y solar de México, quienes dicen que violaría las promesas que México hizo en virtud del Acuerdo de París de 2015 sobre el cambio climático.
La Comisión Reguladora de Energía, o CRE, se incorporaría bajo la CFE según los planes del gobierno, dijo Nahle.
