Rafael Alba es el único atleta de taekwondo que representa a Cuba en los Juegos Olímpicos y podría ser el candidato a inaugurar el medallero por nuestro país
TOKIO.― Inaugurados los juegos de los rostros escondidos, sin público en las gradas y un inusual sistema automatizado para solicitar el acceso a las instalaciones deportivas, que lo mismo te aceptan que deniegan sin saber uno exactamente bajo qué criterios, Cuba comenzó su andar olímpico en el agua con la joven remera Venega, pero no es hasta el 27 que se espera la primera presea. Otra cosa sería pura sorpresa.
El único atleta de taekwondo cubano aquí se vislumbra como el candidato a inaugurar el medallero por nuestro país, si en definitiva Rafael Alba, bicampeón mundial (2013 y 2019), consigue «amanecer» en el podio.
Su debut será ante el macedono Dejan Georgievski, quien no tiene un palmarés que parezca comprometer el inicio exitoso del santiaguero, pues no ha podido avanzar mucho en los torneos de alcurnia en los cuales se ha presentado.
Sin embargo, la situación cambia en la presunta segunda salida, cuando Alba debe chocar con el subtitular de Río de Janeiro 2016, el nigerino Abdoul Razak Issoufou Alfaga.
En su hoja de servicios, el africano exhibe además de la presea plateada en la pasada edición olímpica, el oro conquistado en la cita del orbe de 2017 y milita en la liga alemana de ese deporte.
De salir airoso en esa pelea, Alba habría despejado uno de los tramos más escabrosos, pero ninguno de los siguientes adversarios resultan un manjar. Aquí solo vinieron los 16 mejores en cada división.
También es pública la ruta de los boxeadores, un septeto llamado a sonar alto y claro con sus puños para empujar a Cuba en el medallero. Los siete cubanos quedaron bye en la primera salida, por lo que ninguno escalará al ring antes del 27 de julio cuando debuten Julio César La Cruz ante el kenyano Elly Ochola y Roniel Iglesias frente al vencedor del combate entre el anfitrión Quincy Okazawa y el indio Vikas Krishan.
A sus 38 años, Ochola no va a un Mundial desde 2013 sin que haya podido avanzar mucho en ellos y ni siquiera ha ganado el campeonato africano, así que sus horas están contadas en Tokio.
Se presume que sea Krishan el primer rival de Iglesias, pues estos resultan sus terceros juegos olímpicos (quedó quinto en la urbe carioca) y en igual cantidad de mundiales atesora un bronce en 2011. En uno y otro tipo de justas, se ha ubicado siempre en el top ten.
Esperemos que tenga acceso a la mayoría de las competencias donde haya cubanos. Ya, por ejemplo, me denegaron la solicitud para el remo, y por la madrugada recibí un mensaje cambiando la decisión. Que ni dormir se puede tranquilo con 13 horas de diferencia.
