El gobierno israelí enviará a Corea del Sur unas 700.000 dosis de la vacuna contra el coronavirus de Pfizer que pronto expirará, en un acuerdo de intercambio que el primer ministro Naftali Bennett calificó como un «ganar-ganar» después de que los palestinos rechazaron una oferta similar. Anunciado por la oficina de Bennett el martes temprano, […]
Anunciado por la oficina de Bennett el martes temprano, el acuerdo hará que Tel Aviv envíe cientos de miles de dosis casi vencidas de inmediato, mientras que Seúl, que actualmente se está quedando sin vacunas, acordó devolver el mismo número para septiembre u octubre, después de su futuro. se cumplen los pedidos.
«Seguimos protegiendo la salud de los ciudadanos israelíes», dijo Bennett, calificando el acuerdo de «ganar-ganar» y agregó que «Corea del Sur recibirá [vacunas] de nuestro inventario existente, y nosotros recibiremos [dosis], de su envío futuro «
Si bien inicialmente se llegó a un acuerdo similar con los palestinos el mes pasado, y Tel Aviv acordó entregar casi un millón de sus vacunas que expiraban, la Autoridad Palestina determinó que las dosis estaban demasiado cerca de su fecha de vencimiento después de recibir el primer envío, cancelando la tratar por completo.
, Después de que ese acuerdo fracasó, el ministro de Salud de Israel, Nitzan Horowitz, dijo el domingo que los funcionarios estaban en contacto con «otro país» y que se podría llegar a un acuerdo «en los próximos días». Se negó a especificar el país en ese momento, diciendo que eso podría socavar las negociaciones.
Horas antes de que se anunciara el acuerdo con Corea del Sur, el Ministerio de Salud de Israel informó de una disminución en la efectividad de la vacuna Pfizer, la principal inmunización contra el coronavirus del país. Si bien anteriormente se desempeñaba en el rango del 90%, durante el último mes el jab ha disminuido a una efectividad estimada del 64% contra infecciones de cualquier gravedad en medio de la rápida propagación de una nueva mutación denominada «variante Delta».
Los números rezagados llevaron a los funcionarios de salud a encargar dos estudios para analizar si se necesitará una tercera dosis de ‘refuerzo’ para combatir la cepa más contagiosa, mientras que el gobierno está considerando revivir las restricciones en medio de un pequeño aumento en los nuevos casos, el 90% de los cuales han vinculado a la variante Delta.
Alrededor del 60% de la población de Israel ha recibido al menos una dosis de la inoculación, aunque también han comenzado a aparecer infecciones entre los vacunados. Más de la mitad de los nuevos pacientes informados el viernes pasado ya se habían inyectado, lo que alimenta las preocupaciones entre los funcionarios de salud mientras corren para estudiar la variante más nueva.
