Los consumidores siempre están buscando un beneficio económico cuando desean adquirir un producto por internet, por lo que de acuerdo con un estudio realizado por NielsenIQ, ocho de cada 10 mexicanos dedican su tiempo online a comparar precios, por lo que visitan entre dos y tres retailers para conseguir la ‘mejor oferta’.
El estudio reveló que la pandemia vino a incrementar esta situación, ya que el 62 por ciento de los internautas vieron afectados sus ingresos por la contingencia sanitaria. Incluso, el 46 por ciento de los consumidores aún tienen en mente que comprar por internet es más económico y que las tiendas online están llenas de promociones.
Asimismo, un 44 por ciento de los visitantes ‘curiosos’ de una tienda en internet, se convierten en compradores si el producto está en promoción, por lo que una de las grandes conclusiones del estudio realizado por NielsenIQ es que la prioridad del consumidor está orientada al precio.
Se estima que tres de cada 10 artículos de las distintas categorías están bajo algún tipo de promoción en la red, ya sea descuento directo, más contenido por el mismo precio, precio exclusivo online o meses sin intereses para las compras a crédito.
Aun cuando una marca minorista se haya ganado el corazón de un comprador y esté posicionada como su tienda favorita, cuando se trata de compras digitales siempre estará la comparación con su competencia de por medio. “El 74 por ciento de los eShoppers visita varios sitios antes de comprar y se queda con el que le ofrezca un mejor precio”, se puede leer en el estudio.
“En el mundo digital todo sucede a una velocidad mayor, y para mantener el ritmo frente a esa evolución es necesario entender que todas las actividades precompra online del shopper mexicano están enfocadas en buscar el beneficio económico, por lo que el precio debe estar en el centro de la estrategia”, dijo Paulina Ortiz, líder de eCommerce de NielsenIQ México.
De manera complementaria, los datos de Nielsen también revelaron que el dinamismo de los precios digitales es vertiginoso y varía dependiendo el producto.
Categorías como cerveza o papel higiénico presentan fluctuaciones de precio día a día e incluso entre horas de un mismo día, mientras que en productos como leche o agua las variaciones son menos pronunciadas.
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