Después de un lanzamiento de gran controversia, desde esta institución han puesto en marcha una investigación para comprobar cómo CD Projekt gestiona la situación.
El estrellado lanzamiento de Cyberpunk 2077 ha sido objeto de
múltiples titulares desde su llegada al mercado español y mundial, el pasado 10 de noviembre del pasado año. En ese momento, el título de
CD Projekt RED irrumpía en las plataformas de
PC, PS4 y Xbox One, estando su versión de consola plagada de
bugs y una optimización técnica que dejaba mucho que desear. Después de que un bufete de abogados haya presentado
una demanda colectiva contra el estudio polaco,
la Oficina de Competencia y Protección del Consumidor de Polonia ha entrado ahora en escena. Desde esta institución ponen la lupa en las oficinas de CD Projekt RED para
comprobar cómo van a gestionar esta situación. De no seguir con los procedimientos esperados,
podrían enfrentarse a una enorme multa.
Vídeo:Cyberpunk 2077 y la oficina del consumidor de Polonia
Los problemas de
Cyberpunk 2077 y
CD Projekt RED parece que continuarán a lo largo de este 2021, siendo este uno de los lanzamientos más catastróficos de la historia del videojuego. Si la reputación del estudio polaco no estaba ya lo suficientemente manchada, la situación
ha terminado llamando la atención de la Oficina de Competencia y Protección del Consumidor de Polonia (UOKiK). Esta institución gubernamental se encarga de
brindar información, ayuda y orientación a los ciudadanos para proteger sus derechos como consumidores y usuarios.
Malgorzata Cieloch de la UOKiK reveló en una entrevista con el medio
Dziennik Gazeta Prawna (vía
Benchmark) que la oficina del gobierno
controlará el progreso del estudio polaco sobre los parches prometidos, destinados a actualizar las versiones de consola del juego, las más afectadas. Además, comprobarán
cómo CD Projekt lidia con los compradores descontentos del juego. Si la compañía no cumple con las expectativas, se puede enfrentar a una multa de hasta el 10% de sus ingresos anuales.
"Comprobaremos
cómo está trabajando el fabricante para introducir correcciones o solucionar las dificultades que impiden que el juego se ejecute en diferentes consolas, pero también
cómo pretende actuar en relación con las personas que se han quejado y están insatisfechas con la compra por no poder juega el juego en su equipo a pesar de las garantías previas del fabricante", se lee en la declaración.
Si bien es probable que no se alcance esa situación en la que CD Projekt tenga que enfrentarse a una multa, lo que resulta innegable es que
la reputación de la compañía ha quedado muy dañada. El portal de crítica Open Critic también emitía un comunicado donde tachaba a la firma de haber exhibido
un comportamiento "engañoso y egoísta", aseverando que
el estudio habría ocultado a conciencia el estado en el que se encontraban las versiones de PS4 y Xbox One. "Fue engañoso, egoísta y explotador.
Y, de todos modos, lo hicieron".
