En ocasiones un fracaso electoral puede convertirse en un negocio rentable. Muy rentable, incluso. Faltan dos días para que Francisco Álvarez-Cascos acuda a los juzgados de Oviedo por la querella presentada por su ex partido, Foro Asturias Ciudadanos (FAC), contra su fundador. La acusación: apropiación indebida y administración desleal de fondos de la formación. elDiario.es ha tenido acceso a documentos que indican que Cascos pasó de cobrar 63.000 euros anuales como presidente del Principado (2011) a cobrar más de 134.000 a Foro Asturias cuando dejó de serlo (2012).
Hablamos de cerca de dos millones de euros cargados a FAC entre 2011 y 2019 en salarios, facturas y gastos supuestamente injustificados y acuñados por su promotor en conceptos tan peculiares como videojuegos, licencias de pesca, facturas de kilometraje, zapatos de mujer o estancias de hotel para los familiares de Álvarez-Cascos. En consecuencia, la comisión directiva de Foro, al frente de la cual se encuentra la actual presidenta, Carmen Moriyón, decidió expulsar a Cascos el 19 de junio y acusarlo ante el juez.
Ese proceso va a celebrarse en medio de las auditorías y declaraciones para tratar de enterrar políticamente al ex presidente del Principado de Asturias y así acabar con la guerra interna que castiga al partido desde hace un año.
Un ascenso repentino
"El dato es demoledor", consideran desde la cúpula de Foro en referencia a los salarios que aparecen en las declaraciones de bienes firmadas por Cascos en 2012, cuando deja la presidencia del Principado y acepta su acta como diputado; y de 2015, cuando abandona finalmente su escaño en la Junta General.
Álvarez-Cascos fundó Foro Asturias Ciudadanos el 4 de febrero de 2011, pocas semanas después de que hubiese abandonado el Partido Popular por desavenencias con su líder, Mariano Rajoy. En el grupo parlamentario había militado durante 34 años como vicepresidente, ministro, diputado y senador, antes de poner rumbo a Asturias.
Cuatro meses después de su fundación y contra todo pronóstico, Foro ganó las elecciones en el Principado con 16 diputados y Cascos fue investido presidente. Misión cumplida: poner fin a la soberanía del PSOE, que obtuvo 15 representantes en la Junta General. El castigo del bipartidismo había entrado en acción en Asturias.
En ese periodo electoral, entre febrero y mayo, Álvarez-Cascos cobró de su formación 24.171 euros antes de jurar su cargo como presidente del Principado de Asturias, según la declaración de bienes firmada por el ex vicepresidente de José María Aznar, el 30 de julio de 2012. ¿El concepto? Mítines del partido que Cascos cobró como conferencias, según la dirección de Foro.
Como presidente de la comunidad asturiana cobraba 63.710 euros anuales y supuestamente ni un euro de su formación ya que "no podía hacerlo". Sin embargo y según fuentes de la dirección de Foro, "pasaba dietas".
Aun así, ni un año conservaría el presidente su feudo en el Principado. Incapaz de llegar a consenso con el PP y de aprobar los presupuestos, volvió a convocar unas elecciones que perdería el 25 de marzo de 2012. Los 12 diputados conseguidos fueron superados por los 17 del PSOE, que recuperó el poder en la comunidad. Un duro golpe para Foro, que empezaría ahí su caída en picado y para Cascos. Aunque no todo iban a ser malas noticias para el ex vicepresidente del Gobierno.
Declaraciones de bienes e intereses
"El mismo día que dejó de ser presidente de Asturias pasó a cobrar del partido", aseguran en Foro, formación de la que recibió en 2014 106.134 euros como salario, según la declaración de bienes e intereses del 24 de julio de 2015.
"Esa cantidad era prácticamente la misma desde 2012", afirman en referencia a los salarios que percibía Cascos de Foro. A esta habría que añadir su sueldo como diputado, que era de 1.820 euros mensuales en catorce pagas, más una asignación al mes de 250 euros. En total, una cifra cercana a los 134.000 euros, "a los que habría que sumar dietas y gastos pasados a Foro", añaden fuentes de FAC.
"En 2018, cuando entramos en la comisión directiva centramos todos los esfuerzos en las elecciones municipales y autonómicas que teníamos seis meses más tarde", explica Jesús Martínez Salvador, secretario general de FAC en Gijón. "Después de ello, hubo que ponerse a regularizar los asuntos económicos del partido". La auditoría encargada para hacerlo reveló estos "gastos de los que no se tenía conocimiento" y por los que se decidió expulsar a Álvarez-Cascos de la formación y llevarlo a los juzgados.
Sin embargo, su fundador sostiene que las cuentas de la formación fueron auditadas por el Tribunal de Cuentas y que nadie puso pegas a su sueldo. "No hay ningún misterio".
Por "decencia política"
Además de los salarios, que ascienden, entre 2012 y 2014, a 457.276 euros, más 33.076 de gastos de seguridad social y 81.946 euros en dietas, según ha informado EL PAÍS; la querella interpuesta por Foro va acompañada de una serie de facturas y contratos de la esfera personal de Cascos.
Adquisición de videojuegos, zapatos, billetes de tren y estancias en hoteles para sus familiares, test psicotécnico para la licencia de armas, alquiler de una sede en Madrid para la formación a una sociedad de la que formaba parte su entonces esposa, además de los honorarios del procurador en una causa relacionada con la trama Gürtel.
"En la querella se han aportado unas pocas pruebas (50)", sostienen desde la parte acusadora. "Casi todos los días y todas las semanas entre 2011 y 2019 pasaba facturas a la formación. Son incontables". El coste total para Foro Asturias asciende a 1,8 millones de euros. Cascos considera que es una "campaña para liquidarlo y convertir a Foro en un apéndice del PSOE", y Moriyón, presidenta del partido, que es un ejercicio de "decencia política".
Primer escenario
"Todo se reduce a una confusión entre el patrimonio del partido político y el patrimonio personal de Cascos", sostienen desde la acusación. El primer escenario de este conflicto judicial tendrá lugar este miércoles en los juzgados de primera instancia de Oviedo.
Acudirá a declarar Carmen Moriyón para ratificar la querella por apropiación indebida y luego lo hará Francisco Álvarez-Cascos, como investigado. El juez dictaminará si hay indicios de criminalidad, en cuyo caso se abriría el juicio oral.
