Los gobiernos de Estados Unidos y Argentina cooperarán más estrechamente para cortar las redes de financiamiento del grupo armado islamista Hezbolá en América Latina, según anunciaron este domingo en Buenos Aires sus respectivos cancilleres, Rex Tillerson y Jorge Faurie.
En Argentina reside una importante comunidad de origen libanés y las autoridades de EE. UU. sospechan que algunos grupos obtienen financiamiento del crimen organizado para apoyar al movimiento armado respaldado por Irán.
"Con respecto a Hezbolá, discutimos sobre cómo podemos, de manera conjunta en la región, perseguir a estas organizaciones del crimen trasnacional: narcotráfico, trata de personas, contrabando, lavado de dinero; porque constatamos sus conexiones con los grupos que financian el terrorismo", aseguró Tillerson durante una rueda de prensa conjunta con Faurie.
El canciller estadounidense agregó que “de manera particular, abordamos la presencia del Hezbolá libanés en el hemisferio, donde consigue financiamiento para sus actividades terroristas. Estuvimos de acuerdo en que es algo que debemos atacar y eliminar”.
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Por su parte, el canciller argentino enfatizó que América Latina "es una zona de paz" que no debe ser amenazada por grupos externos.
"Como dijo el secretario Tillerson, tenemos que estrechar todo el intercambio posible, no solo en el diálogo sino también en la información de las acciones de los grupos que se prevalen del delito internacional para promover sus intereses, con los cuales ciertamente Argentina no coincide", señaló Faurie.
La violencia de Oriente Medio tocó a Argentina durante 1992, cuando la embajada israelí en Buenos Aires fue atacada en un atentado que causó 29 muertes. En 1994, el centro judío-argentino AMIA sufrió otro atentado que dejó 85 muertos, según reseñó la agencia de noticias AFP.
Redacción NTN24
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