«La plantilla del centro penitenciario no solamente destaca por su buen trabajo, sino por su integridad», ha señalado el director de la cárcel de Jaén, Juan Mesa , tras declarar como testigo en el juicio que se está celebrando en la Audiencia provincial de Jaén, bajo el procedimiento de jurado , contra un trabajador del centro penitenciario de Jaén acusado de vender favores y permisos. Durante la jornada, también han declarado compañeros de trabajo del acusado que han rechazado la posibilidad de que se puedan llevar 'vis a vis' irregulares en la prisión o que pudiera influir en las decisiones de la Junta de Tratamiento. Fue en el 2021 cuando arrancó la investigación a raíz de las denuncias de varios internos de la prisión de Jaén, siendo la Comandancia de la Guardia Civil la encargada de investigar estos hechos que han correspondido al Juzgado de Instrucción número 2 de Jaén. El Ministerio Fiscal, que ha ejercido de acusación, ha acusado al funcionario de un delito de cohecho continuado por el que le reclama una pena de seis años de cárcel y 14.400 euros de multa. En declaraciones a los periodistas, el director del centro ha reconocido que «es posible que, en alguna ocasión, pueda haber algún acto que sea inadecuado, pero los propios compañeros inmediatamente estoy seguro que pondrían las cosas en su sitio» pero en todo caso ha rechazado que haya corrupción dentro del centro penitenciario, destacando el buen trabajo y la integridad de la plantilla. Además, Mesa ha recordado que el centro de Jaén se puede considerar referente a nivel nacional y con modelos de trabajo muy avanzados, como son los módulos de respeto y las unidades terapéuticas y ha descartado que el acusado hubiera podido influir en la Junta de Tratamiento de la prisión, un órgano colegiado con ocho miembros que autorizan los permisos y beneficios penitenciarios. No obstante, ha puesto de manifiesto «el interés desbordado» del acusado por conocer las propuestas que se realizaban desde el equipo técnico antes de cada Junta de Tratamiento y es que estas propuestas de permisos «se refrendaban después en 90 o 95 por ciento de los casos» en la Junta de Tratamiento. Según la investigación de la Guardia Civil, el acusado conocía con anterioridad los presos que iban a disfrutar de permisos y a los que supuestamente cobraba por gestionar algo que ya estaba prácticamente concedido. Además, según los internos, el acusado, previo pago de 500 euros, se ofrecía a retirar los partes de incidencias sobre los internos, lo que permitía que sus solicitudes de permisos cumplieran con el requisito de la buena conducta. Mesa ha rechazado tener cualquier tipo de animadversión con el acusado y ha lamentado que desde la defensa se hayan agarrado a este argumento para explicar que este funcionario haya acabado en el banquillo de los acusados. Está previsto que este jueves, la magistrada presidenta del tribunal, con los informes de las partes, entregará al jurado el objeto del veredicto, un cuestionario al que deberán responder y que determinará la inocencia o culpabilidad del acusado.