En la literatura de la economía circular existen 3 ‘R’ principales para concienciar a los ciudadanos sobre el cuidado del medio ambiente: reducir, reutilizar y reciclar. Generalmente, a la ‘R’ que más importancia se le ha dado ha sido esta última, considerándose el reciclaje como la única solución ante la crisis climática y la gran cantidad de residuos que genera la sociedad año tras año.
Meritxell Hernández, CEO y fundadora de Roll’eat, considera que “en los últimos años, han ido adquiriendo protagonismo otras ‘R’ como reparar, recuperar o reeducar”. No obstante, hay que ‘superar’ la idea de que el reciclaje es la solución y opción principal en la hora de evitar la generación de residuos. Reeducar en la reutilización y reducir la cantidad de residuos que generamos debería ser la alternativa prioritaria para llegar al residuo cero”.
Desde Roll’eat fomentan esta idea a través de los envoltorios sostenibles y reutilizables para alimentos. Los Boc’n’Roll han llegado a escuelas y casas de todo el mundo, inicialmente desde Cataluña y España, y desde hace un tiempo, también está presente en algunos países de Europa y EEUU. Este tipo de envoltorios reutilizables consiguen eliminar por completo el uso del papel de aluminio y reducir drásticamente la generación de plásticos desechables.
Solo se recicla el 9% de los plásticos
Precisamente, la gran asignatura pendiente son los plásticos. Según datos de la OCDE, el mundo genera 400 millones de toneladas de residuos plásticos cada año, el doble que hace 20 años, y de estos solo el 9% se recicla. Un 19% se incinera, el 50% se usa como relleno sanitario y el 22% elude los sistemas de gestión de residuos, por lo que va a parar a rellenos sanitarios no controlados, se quema en fosas abiertas o acaba en entornos terrestres o acuáticos.
Para Hernández, esto es consecuencia de otro problema importante: la sociedad capitalista, que se relaciona con un mayor consumo de bienes. “El consumo desmedido, en el que predominan los productos de un solo uso y que tienen una vida útil muy corta, acaba por generar residuos de una manera muy rápida”, apunta.
Desde Roll’eat abogan por consumir de una forma más respetuosa con el medio ambiente, evitar embalajes innecesarios, escoger productos reutilizables por encima de los de un solo uso y apoyar iniciativas para la prevención y reducción de residuos y que velen por un consumo responsable.
