Suiza, sin apenas opciones como colista del grupo, frenó en seco a Portugal en esta Liga de las Naciones. Se benefició así España porque esta derrota del vecino ibérico les venía muy bien a los chicos Luis Enrique porque, de esta forma, escalaban a la cumbre de la clasificación.
No es que los helvéticos practicaran un fútbol trepidante, que no lo hicieron, pero la simple virtud del orden les bastó para mantener a raya al combinado rojiverde, que echó de menos el liderazgo de Cristiano Ronaldo.
Seferovic, jugador del Benfica, puso el único gol en el marcador para los helvéticos a los 56 segundos con un gran remate de cabeza y, a partir de ahí, se vio que la noche sin el delantero del United podía terminar como finalmente sucedió: con un paso atrás de la selección lusa en esta carrera en la que solo restan dos jornadas, ya en septiembre.
La selección lusitana trató de rectificar sacando a Gonçalo Guedes tras el descanso y, poco después, a Bernardo Silva en busca de un giro que no llegaba. También Diogo Jota, del Liverpool, se sumó a la tentativa de dar la vuelta al encuentro
Y Omlin, el guardameta suizo, se multiplicó a lo largo de la velada para lograr mantener su portería a cero.
El propio Fernando Santos lo había anunciado con antelación: Ronaldo no se trasladaría a Ginebra debido a “la gestión física”, una expresión un tanto eufemística que desató algunas especulaciones.
El veterano entrenador luso explicó: “No son problemas físicos, es solo una gestión normal. No tendría sentido que viajaran 26 a Suiza, cuando solo pueden estar 23 en el equipo”. El caso es que la ausencia del delantero estelar de los ‘diablos rojos’ ha coincidido con la decisión de un juez norteamericano a su favor en la demanda contra él por supuesta violación de una ciudadana estadounidense.
