Hace ahora justo diez años, en 2012, acababan las excavaciones que descubrieron la cripta arqueológica en el Patio de Banderas con los restos más antiguos que hay en Sevilla y se redactaba el proyecto de actuación para ponerlos en valor. Hoy, una década después, todo sigue igual. El hallazgo de aquel vestigio de la antigua Híspalis no sólo no ha dado un impulso a la zona Patrimonio Mundial sino que, para colmo, está absolutamente degradada y olvidada.
En octubre de 2013, por razones presupuestarias el Patronato del Alcázar renunció al proyecto de hacer visitable al público en general la cripta y decidió cubrir el área excavada y restablecer el Patio de Banderas a su estado previo, a la espera de que el Ayuntamiento llegase a un acuerdo con Patrimonio del Estado para comprar la casa número 11, situada junto al apeadero, que era la que según el proyecto debía servir de acceso subterráneo a la cripta como último hito de la visita al Alcázar. Sin embargo, el Gobierno central hizo una maniobra administrativa cuestionable para vender esa casa al arrendatario que llevaba viviendo en ella desde los años 60 mediante un contrato de renta antigua y sin sacarlo a concurso público, lo que anuló el proyecto de la cripta.
Adepa, a través del abogado Ángel Alarcón, llevó a los tribunales el asunto. Los conservacionistas consideran que en aquella venta se produjeron «vulneraciones flagrantes que iban contra el interés público» para beneficiar a un particular. El Estado, para saltarse el concurso público, hizo uso de un sistema muy residual como es el de la enajenación directa por el cual cualquier administración puede vender el bien a un tercero sin pasar por concurso. Para ello, el inquilino dejó de pagar la renta y se convirtió en 'okupa' de forma que Patrimonio del Estado acudió al juzgado para denunciarlo pero, cuando llegó el momento del desahucio, lo que hizo fue presentarle una oferta para que comprase la vivienda como ocupante de la misma. «El Gobierno hizo una triquiñuela legal para hacerlo pasar por un okupa y, así, venderle la casa», explica el abogado denunciante. Esa maniobra implicaba, además, que en el momento de la escritura, el inquilino lo cediese a su hijo, un tercero que, de buena fe, no podía verse afectado en el fraude que hubiera podido cometer el anterior titular del inmueble -expone Alarcón-, por lo que no se le podrían pedir cuentas si se llegase a demostrar la ilegalidad y así quedaría la casa en el patrimonio familiar.
El asunto para anular la compraventa está en la Audiencia Nacional, a la espera de la contestación de la demanda por parte de Patrimonio del Estado y el propietario actual y celebrar el juicio.
La cripta del Patio de Banderas quedó oculta pero nunca se repuso la fuente ornamental en la plaza
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J. M. Serrano
Mientras tanto, el Ayuntamiento sigue mirando impasible y no se ha manifestado como afectado por aquella operación llevada a cabo por una administración del mismo color político. En cambio, sí ha logrado que el Ministerio de Hacienda, de María Jesús Montero, le venda las casas 7 y 8 del Patio de Banderas, donde aparecieron restos del primitivo palacio de Al-Mutamid, y anunció hace meses que los abriría a visitas guiadas antes de final de año, algo que tiene todos los visos de que acabe retrasándose.
Otro de los problemas que tiene sin resolver la Administración pública en esta zona es la reapertura de la puerta original almohade que da a la calle Joaquín Romero Murube y que se encuentra dentro de la casa 16 que está cedida a una fundación estatal de Biodiversidad, sin que se publicite ni tenga un horario de visita pese a esconder unos restos fundamentales para entender la historia del Alcázar. <blockquote class="twitter-tweet" data-width="550"><p lang="es" dir="ltr">Un honor que hayan puesto mi nombre a tan ilustre patio. Agradezco el detalle.<br>¿En qué ciudad me encuentro? <a href="https://twitter.com/hashtag/NicoleKimpel?src=hash&ref_src=twsrc%5Etfw">#NicoleKimpel</a><a href="https://twitter.com/hashtag/patiodebanderas?src=hash&ref_src=twsrc%5Etfw">#patiodebanderas</a> <a href="https://twitter.com/hashtag/spain?src=hash&ref_src=twsrc%5Etfw">#spain</a> <a href="https://twitter.com/hashtag/FelizJueves?src=hash&ref_src=twsrc%5Etfw">#FelizJueves</a> <a href="https://t.co/0lnKsksDyj">pic.twitter.com/0lnKsksDyj</a></p>— Antonio Banderas (@antoniobanderas) <a href="https://twitter.com/antoniobanderas/status/1524648984274427904?ref_src=twsrc%5Etfw">May 12, 2022</a></blockquote> <script async src="https://platform.twitter.com/widgets.js" charset="utf-8"></script>
Ya a nivel estético, el Ayuntamiento tampoco ha sido capaz de resolver en diez años el problema de deterioro 'in crescendo' que tiene la casa 12, cuya fachada está repleta de desconchones pese a que se encuentra en la parte más fotografiada del entorno, anexa al Callejón de la Judería. Allí, precisamente, se hizo una foto el actor Antonio Banderas en una visita reciente a Sevilla, donde se apreciaba el rótulo con el nombre del Patio que coincide con su apellido, y que muestra una imagen decadente. A esto se le suma el mal estado de la propia plaza, que no terminó de restablecerse tras el cubrimiento de la cripta porque el albero sigue estando en mal estado y la fuente hexagonal que adornaba el Patio sigue almacenada en algún lugar desconocido.
