En las últimas horas, el sindicato de trabajadores de Casa de Galicia informó que “no se dejará de atender a los socios y el lunes volverá la atención en policlínicas», más allá de cualquier medida gremial.
También anunció que los trabajadores decidieron en asamblea, apelar la decisión de la Justicia, porque el objetivo es que “Casa de Galicia siga siendo Casa de Galicia”.
Por su parte, el integrante del Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT y secretario general de la Federación Uruguaya de la Salud (FUS), Jorge Bermúdez, manifestó que el cierre de la mutualista es una “afrenta y una mancha” a todo un país, consecuencia de una “insólita, equivocada y descorazonada decisión judicial”.
“Nosotros respetamos la Justicia, pero esto no es justicia, aquí se decidió por vía administrativa, primero enviar dos síndicos que no tenían ninguna capacidad de gestión y luego cuando se toma conciencia que se podía caer en omisión de asistencia, hay una decisión de un juez que clausura Casa de Galicia”, sentenció Bermúdez.
Por su parte, el Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT emitió una declaración a través de la cual manifiesta su más profunda solidaridad con la FUS, con los trabajadores en su conjunto, con los usuarios de Casa de Galicia ante la “intempestiva e irresponsable decisión del Poder Judicial”.
La central sindical expresó, asimismo, “su preocupación por las consecuencias en trabajadores usuarios y por el conjunto del Sistema Nacional Integrado de Salud”.
Exhortó a las autoridades públicas a adoptar todas las decisiones que “satisfagan el cobro de los créditos salariales adeudados a los trabajadores, que garanticen la continuidad de una correcta atención a los usuarios y la fortaleza del Sistema Nacional Integrado de Salud”.
El PIT-CNT se declaró “a las órdenes” a efectos de contribuir a forjar soluciones sustentables.
